¿Jeter ayuda a los Yankees o Miami gana en talento?

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(Miaminews24).- El primer movimiento en la era de Derek Jeter ha levantado cierta sospecha. De un lado se apuntan quienes afirman que el ex torpedero de los Yankees le ha tirado un salvavidas a su antiguo equipo, del otro lado están  aquellos que consideran el cambio interesante y necesario. Aquí hay de todo un poco.

Del lado de Nueva York llegan a Miami el primera base Garrett Cooper y el lanzador zurdo Caleb Smith, a cambio del pitcher derecho Michael King y $250,000 de dinero que puede ser usado en la firma de agentes libres internacionales: en otras palabras, una suma que se destinará a la búsqueda de Shohei Otani.

Esta cantidad enviada a la Gran Manzana aumenta las posibilidades de firmar a Otani, cuyo sistema de disponibilidad en las Mayores se negocia en estos momentos. Los Yankees posen la segunda mayor cantidad en dinero «internacional» con $3.5 millones, solo superados por los Rangers ($3, 535,000).

Igualmente, Nueva York abre espacios en su roster de 40 peloteros en caso de que aseguren a la estrella japonesa que puede brillar desde el montículo y con el madero. En el Bronx deben estar sacando cuentas y afilándose los dientes.

¿Qué gana Miami con estos dos recién llegados?

A primera vista algo de profundidad, algo que pudiera incrementarse en valor las próximas semanas en dependencia de qué peloteros caigan como parte de la purga salarial de los nuevos propietarios.

Cooper, un gigante de 6.6 pies, tuvo buenos números en Triple A antes de ser ascendido a los Yankees y batear para .326 con cinco dobles y seis impulsadas en 45 turnos de Grandes Ligas.

Smith, por su parte, finalizó con efectividad de 2.39 en 17 aperturas de Triple A, pero la temporada del 2016 le fue muy mal con los Yankees al terminar con 7.71 de promedio de carreras limpias en 18.2 entradas.

Los preocupados se preguntarán para qué tener otro inicialista, cuando ya se posee un hombre de las características de Justin Bour, o para qué entregar una suma de dinero que se puede emplear en el mercado de América Latina, ahora que cada vez se hace más difícil asegurar talentos de esta región por las restricciones monetarias.

Todavía es muy prematuro para evaluar el impacto de esta transacción y su valor real -para bien o mal- estará ligado con otros movimientos futuros, esos que se vienen en torno a los principales jugadores del club y no de este par de hombres con poco nombre.

Fuente: Jorge Ebro/ El Nuevo Herald