(Miaminews24).- El gobernador de Florida Rick Scott a través de un artículo de opinión enviado por su despacho a medios de prensa dijo el miércoles que los Estados Unidos debe “parar de hacer negocios” con Venezuela inmediatamente, y llamó al presidente Donald Trump “a tomar una posición contra [las] brutales dictaduras” de ese país sudamericano y de Cuba.
“En los últimos meses, hemos visto a Venezuela caer en un completo caos”, escribió Scott. “Bajo la brutal y opresiva dictadura de Nicolás Maduro, hemos visto que las cosas van de mal en peor. Hay escasez de alimentos y medicamentos, violencia en las calles e incertidumbre económica”.
Scott agregó que empresas como como General Motors, Bridgestone y General Mills han reducido sus operaciones en el país sudamericano. La aerolínea United Airlines, por su parte, anunció que suspenderá los vuelos a Venezuela el próximo mes, recalcó.
“El Presidente Trump y su Administración tienen la oportunidad de establecer un nuevo rumbo. Uno que reconoce que el pueblo cubano y venezolano merece ser libres y prioriza los derechos humanos, la democracia, la seguridad y el estado de derecho”, opinó Scott.
“Este nuevo curso debe servir como una luz de esperanza para los valientes activistas en Cuba y Venezuela, dejando claro que, si usted es un funcionario del gobierno de Castro o Maduro involucrado en la violación de los derechos humanos, se le prohíbe obtener cualquier visado para entrar a Estados Unidos”, agregó.
Scott dijo que no le extraña que empresas norteamericanas estén abandonando sus negocios en Venezuela, en medio de las violentas protestas y los problemas económicos.
“Los venezolanos esperan en largas filas para comprar las necesidades básicas, mientras que la dictadura de Maduro culpa a las empresas por la escasez del país”, dijo, agregando que la turbulenta situación de Venezuela es similar a la realidad que desde hace décadas se vive en Cuba.
En ese sentido Scott criticó duramente, como lo ha hecho antes, la normalización de relaciones entre la isla y EEUU encabezada por la administración del ex presidente Barack Obama.
“Dos años y medio después, la represión está creciendo y la represión brutal al movimiento pacífico de oposición es alarmante”, dijo Scott sobre los presuntos cambios que se auguraban en Cuba tras la reanudación de las relaciones.
El gobernador dijo que en el acuerdo entre Obama y Raúl Castro no se dio prioridad a los intereses de EEUU, como las reclamaciones de propiedad de ciudadanos estadounidenses.
“Para herir aún más a la comunidad, el presidente Obama incluso conmutó la sentencia de cadena perpetua de un espía cubano que fue condenado por conspiración en el asesinato de tres ciudadanos estadounidenses”, dijo Scott al tiempo que agregó que la nueva política hacia Cuba debe cambiar “substancialmente”.
Fuente: El nuevo Herald