Las autoridades confirmaron el hallazgo del cuerpo sin vida de un niño de 12 años que había desaparecido en el mar este viernes por la tarde, luego de ser arrastrado por una fuerte corriente de resaca en una playa de Fort Lauderdale.
El Departamento de Rescate informó que las primeras llamadas de emergencia se recibieron a las 4:42 p.m. Inmediatamente, se desplegó un operativo de búsqueda y rescate que incluyó a la Guardia Costera, dos embarcaciones de bomberos, un helicóptero, botes privados y personal en tierra.
A pesar de las difíciles condiciones meteorológicas —con fuerte oleaje y vientos intensos—, buzos y rescatistas trabajaron por horas en el área demarcada. Incluso embarcaciones privadas se sumaron al esfuerzo.
Según el Departamento de Rescate, cuatro adolescentes habrían quedado atrapados por una corriente de resaca mientras nadaban. Solo tres de ellos lograron ser rescatados y llevados de regreso a la orilla.
El incidente ocurrió en medio de una advertencia activa por corrientes de resaca para los condados de Miami-Dade y Broward, que se espera continúe durante todo el fin de semana. Además, se emitió una alerta para embarcaciones pequeñas debido a los vientos, incluyendo la zona de los Cayos.
De acuerdo con un familiar, el menor fallecido se encontraba de visita desde Lake Worth, acompañado por su equipo de baloncesto.
Funcionarios recordaron que la luz solar juega un papel crucial en este tipo de operaciones, por lo que el tiempo es un factor crítico en búsquedas en el mar.
Las autoridades insisten en que los bañistas deben nadar únicamente en playas vigiladas por salvavidas y, ante una corriente de resaca, nunca luchar contra ella. En su lugar, recomiendan nadar en paralelo a la orilla hasta salir de la corriente y poder regresar con seguridad.
Con información TELEMUNDO 51
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