Marruecos vs España- Los árabes vuelve a sorprender y eliminando a la roja en penales por primera vez en la historia, Marruecos está entre las mejores ocho selecciones de una Copa del Mundo, luego de superar a España de forma sorpresiva en la ronda de penales y obtener su boleto a los cuartos de final.
Te Puede Interesar: ¿La MLS? Cristiano Ronaldo ya tendría un nuevo equipo
Ambos conjuntos llegaron igualados a cero a los disparos directos y allí los marroquíes se impusieron 3-0 a los ibéricos, que se marchan a casa en medio de un decepcionante torneo.
El arquero Yassine Bounou se vistió de héroe al atajar dos de los penales ibéricos, para que de esa forma los marroquíes pudieran mantener vivos sus sueños mundialistas en Catar.
Marruecos vs España
n un partido de ida y vuelta, con momentos tanto para el juego de pases, marca de la casa de los españoles, como para los movimientos marroquíes, ambos tuvieron oportunidades para inclinar la balanza a su favor durante los 120 minutos de juego.
Pero el partido más importante en la historia de Marruecos se resolvió desde el manchón de penal. Bounou atajó dos de los tres penales de los españoles, mientras que Pablo Sarabia remató otro al palo. Achraf Hakimi puso la puntilla para el seleccionado norafricano con el cuarto y último tanto penal.
Marruecos se convirtió en el primer equipo africano que alcanza los cuartos de final de un Mundial desde Ghana en 2010.
Los marroquíes han sido una de las revelaciones al acabar primero en un complicado grupo con Croacia, actual subcampeona, y Bélgica para igualar su mejor resultado histórico, la fase de octavos en México 1986. Asimismo, también alcanzan la instancia de cuartos de final en su sexto Mundial.
Marruecos se medirá en la siguiente ronda al ganador del choque entre Portugal y Suiza que se disputaría más tarde en el día. A pesar de que nuevamente proyectan partir como víctimas en cuartos, sea cual sea el rival, este nuevo golpe sobre la mesa deja claro que la selección africana está para grandes cosas.
Fin de trayecto para España en Qatar. La selección murió en los penaltis, como cuatro años antes en Rusia, víctima de su falta de inspiración en los metros finales. Cayó ante Marruecos, una selección sólida y contundente, capaz de llevar al límite físico y mental al conjunto de Luis Enrique en un partido de alta tensión en el Education City.
España no mereció perder, pero el Mundial no admite matices ni dudas: la selección tuvo de todo menos lo más importante, el gol. Mandó en el partido, pero se estrelló contra la muralla marroquí. Le faltó último pase y remate. A Marruecos, su impecable ejercicio defensivo le sirvió para hacer historia y alcanzar por primera vez los cuartos de final de un Mundial.
LA CARA MÁS AMARGA DEL FÚTBOL
Fue otra cruel despedida de España de un Mundial. La selección llegó a la tanda de penaltis en un estado de agotamiento tal que convirtió la tanda en una tortura. Fallaron Sarabia, Soler y Busquets sus lanzamientos, los tres únicos de la selección. Demasiado lastre a esas alturas. Achraf marcó su penalti y Marruecos entró en éxtasis frente a la desolación de España, otra vez obligada a vivir la cara más amarga del fútbol.
UNA DERROTA INCOMPRENSIBLE
Luis Enrique rescató el plan inicial del torneo, aunque con una sorpresa: jugaron de inicio los mismos que ante Costa Rica (7-0) a excepción de Azpilicueta.
Fue Marcos Llorente el elegido para ocupar el carril diestro de la defensa. Le tocó un partido incómodo, de sufrimiento constante y poca progresión en ataque.
España aplicó punto por punto el guion de Luis Enrique. Tuvo el balón y gobernó el partido desde el pitido inicial. Intentó abrir el campo con Olmo en la izquierda y Ferran en la derecha -Asensio en la posición de falso nueve-, pero no lo tuvo fácil ante el bloque marroquí, un equipo sólido, compacto y muy bien trabajado por su entrenador, Walid Regragui.
EN UN AMBIENTE HOSTIL
La selección, que jugó de visitante en el Education City de Doha, bajo la presión asfixiante del público marroquí, mayoritario en las gradas, se puso manos a la obra pero pronto supo que no tendría un día cómodo.
Por el cuajo del rival, por el desconcertante arbitraje del argentino Rapallini y por su propia falta de inspiración. España jugó un partido más teórico que práctico: le faltó último pase y remate, cambio de ritmo y desborde, esos matices que rompen los partidos y decantan resultados.
Marruecos saltó al campo con las ideas muy claras: aplicarse en defensa, no dejar huecos al rival y jugar como un bloque, en no más de 40 metros.
Pierna dura y al choque. Y en ataque, pescar algún contragolpe o aprovechar alguna acción aislada, como las de Boufal en la primera mitad, encargado de complicarle mucho la vida a Llorente. Achraf ya amenazó con un lanzamiento de falta directo al poco del arranque.
Con información de | Diario Las Américas
Obtén información al instante, únete a nuestros grupos de:
Síguenos en Nuestras cuentas de Redes Sociales
Instagram: @miaminews24official
Twitter: @miaminews24
Facebook: Miaminews24.com