Después de que parecía haber camino libre para la realización del Gran Premio de Miami de la Fórmula Uno, parece que todavía hay mucha tela que cortar para que se resuelva este asunto.
El espacio determinado para el circuito específicamente es el amplio estacionamiento del Hard Rock Stadium, donde juegan los Dolphins.
La parte que se opone a la realización de la carrera está liderada por Barbara J. Jordan, comisionada del distrito 1, quien había interpuesto una propuesta que no prosperó al recibir solo seis votos en favor y seis en contra, era el último obstáculo pendiente para que Miami-Dade fuera incluido en el calendario de las competiciones de Fórmula 1, conocida como ‘El Gran Circo’.
“Yo lo percibo como un camaleón. Usted cambia de color, cuantas veces sea necesario, de acuerdo al momento. Usted debería venir con una etiqueta de advertencia para sus compradores”, dijo la comisionada al alcalde Carlos Giménez, muy enfadada.
Según Jordan, al aceptar que se celebren estas competiciones, a pesar de las manifestaciones en contra de los vecinos de la zona, demuestra que se han antepuesto los beneficios económicos a los intereses de la comunidad.
“Desgraciadamente esta es la política que se hace a puertas cerradas sin importar la voluntad de toda una comunidad”, acusó la legisladora condal.
La comisionada explicó que en esa zona de la ciudad existen en la actualidad 106 días de grandes eventos, que de alguna forma impactan en sus residentes. “Allí están los Cirque du Soleil, el Torneo de Tenis, los Juegos de la Universidad de Miami”, enumeró.
“Esta es la única vez que nos hemos opuesto a acoger un evento, porque realmente creemos que no nos beneficia. Estamos pensando en la seguridad de nuestros niños y mayores. Estamos pensando en el impacto que tendrá el ruido y la contaminación en nuestra hogares”, subrayó.
La veterana política más adelante se refirió al supuesto impacto económico que tendría la carrera en los residentes Miami Gardens. “Dicen que nos va a beneficiar con 500 millones de dólares. Sin embargo en las investigaciones que he llevado a cabo no he encontrado esa cifra por ningún lado”, observó.
“Decepción”
Una de las partes más candentes de su alocución fue cuando Jordan se dirigió al alcalde Giménez y para mostrar lo que calificó de gran decepción “gran decepción” le dijo:
“Hace cuatro años se presentó aquí como alguien a quien no le gustaba lo que estaba ocurriendo en nuestro país. Usted dijo incluso que se planteaba cambiar su forma de votar. Me convenció de que usted sería lo mejor que le podía pasar a esta comunidad. Y basándome en sus promesas, yo le apoyé en los múltiples encuentros con los residentes y pedí que le votaran.”
“Ahora cuando le escucho, parece que todos sus puntos de vista han cambiado. Parece que usted ahora ve la luz que antes no le llegaba”, dijo. “Usted es mi gran decepción”, recalcó.
Por su parte, Giménez evadió entrar en careo con la comisionada. Se limitó a enumerar los cambios que los organizadores del equipo de fútbol americano Dolphins, que es el anfitrión de la carrera, habían realizado en el proyecto, “tras las reuniones que sostuvieron con los miembros de la comunidad”.
Los organizadores prometieron mantener las carreras fuera de calle NW 199. Todas las competiciones se correrán íntegramente en un circuito dentro del área del estacionamiento del estadio. Y garantizaron que la carrera “no se desarrollará durante horario escolar”, ni habrá competiciones nocturnas, detalló Giménez.
Una de las objeciones más repetidas para oponerse a las carreras era el ruido. Sin embargo, según el alcalde Giménez, los estudios demuestran que “no se sobrepasarán los 76 decibelios dentro de las casas más próximas al circuito” de competición, unos 200 metros de distancia.
La multinacional estadounidense Liberty Media, que controla la Formula One Group, podrá traer al sur de la Florida, a partir de 2021, los bólidos más veloces de la tierra a lidiar el Gran Prix de Miami, 70 años después del surgimientos de esta carreras.
Detalles a tener en cuenta
Fórmula 1 es, sin duda, una de las competiciones más reconocidas y seguidas a nivel mundial. Cuenta con más 500 millones de espectadores en el mundo. Puede llegar a facturar cerca de 4.000 millones de dólares al año. Muchas ciudades del mundo pagan verdaderas fortunas por acoger los Gran Premio de F1. Un ejemplo cercano es México que pagó 210 millones de dólares por ser incluida en el Gran Circo durante cinco años. Otras ciudades pagan 40 millones de dólares por acoger estas carreras de deportistas de élite.
El Gran Circo es muy rentable para las empresas de televisión, las hoteleras, los restaurantes, las relacionadas con el turismo, el transporte, y la cultura. Según la revista especializada Konfio, solo en 2017 en México se crearon 8.700 empleos relacionados con este deporte.
Fuente: miamidiario.com