Johnette Hardiman, la fiscal estatal adjunta que decidió no presentar cargos de agresión sexual contra un policía de Hialeah ahora encausado federalmente por alegaciones similares, renunció a la presidencia de un destacado grupo de derechos de la mujer en Miami-Dade.
Hardiman presentó su renuncia el jueves al Women’s Fund de Miami-Dade debido a las repercusiones sobre la manera en que manejó una investigación estatal en 2016 al entonces sargento Jesús Menocal Jr., de la Policía de Hialeah, según la organización. La renuncia de Hardiman tiene efecto inmediato, 12 días antes que su período de dos años al frente de la junta directiva del grupo expirara el 31 de diciembre.
“Estoy orgullosa de los años que he trabajado con el Women’s Fund y siempre apoyaré su misión”, expresó Hardiman en su carta de renuncia.
“Ella pensó que renunciar sería lo mejor para la organización”, dijo el jueves al Miami Herald Kathy Andersen, directora ejecutiva del Women’s Fund. “Agradecemos la decisión de Johni de renunciar y reconocemos sus muchos años de servicio en la junta directiva”.
La manera en que Hardiman manejó el caso de Menocal fue objeto de escrutinio después que el Herald reveló el mes pasado que no había entrevistado a tres de las supuestas víctimas de Menocal antes de considerar que no tenían credibilidad como testigos. En un memorando en que justificó el abandono de la pesquisa por parte de la Fiscalía Estatal de Miami-Dade a Menocal, Hardiman calificó a las mujeres de “pandilleras”. El memorando calificó de “una bipolar que siempre se está escapando de su casa” a una de esas supuestas víctimas, una adolescente quien dijo llorando a los investigadores que Menocal la había obligado a realizarle sexo oral cuando ella tenía 14 años”.
El Women’s Fund, fundado en 1993, ha tenido una postura mucho más visible en años recientes, uniendo fuerzas con el Comité Anfitrión del Super Bowl, el despacho de la fiscal estatal Katherine Fernández Rundle y agencias federales para liderar la campaña Stop Sex Trafficking Campaign durante el próximo juego de campeonato de la NFL en febrero de 2020.
“Vamos a enviar un mensaje muy fuerte de que no vamos a tolerar la explotación de nuestras jóvenes”, dijo Fernández Rundle el mes pasado en una conferencia de prensa en que presentó la iniciativa.
Andersen dijo que no quería comentar sobre la forma en que Hardiman y la Fiscalía Estatal trataron a las víctimas.
“No criticamos públicamente a individuos o instituciones”, dijo. “Nos dedicamos a trabajar con aliados para crear cambios sistémicos que mejoren la vida de las mujeres y las niñas en Miami-Dade”.
No fue posible contactar a Hardiman el jueves, y Ed Griffith, portavoz de la Fiscalía Estatal, no respondió.
En 2016, Hardiman declinó presentar cargos de agresión sexual y otros contra Menocal después que cuatro menores y mujeres alegaron que en 2015 las había agredido sexualmente y amenazado. Hardiman concluyó que las pruebas no eran suficientes.
Pero la semana pasada, la Fiscalía Federal presentó cargos de violación de derechos civiles contra Menocal, acusándolo de amenazar a una adolescente y a una mujer joven para que tuvieran relaciones sexuales con él.
El nuevo caso es resultado de una investigación del FBI que comenzó después que la Fiscalía Estatal declinó procesar a Menocal. Al menos una de las víctimas en el caso federal también había hecho una denuncia durante la pesquisa federal. El arresto de Menocal ocurrió aproximadamente un mes después que el Miami Herald publicó un reportaje que examinaba cómo la Policía de Hialeah y la Fiscalía Estatal de Miami-Dade manejaron su caso.
Menocal, de 32 años, se declaró inocente de los nuevos cargos en el tribunal federal de Miami este miércoles. El viernes pasado fue despedido después que el FBI lo arrestó en la sede de la Policía de Hialeah.
Menocal, que llevaba 13 años de agente de la ley en Hialeah, pudiera ser condenado a cadena perpetua por el primer cargo porque involucra el “secuestro” de una menor cuando la llevó a una habitación sin cámaras de vigilancia en una estación de policía, donde la presionó para que tuviera relaciones sexuales con él. También enfrenta un máximo de 10 años de prisión por el segundo cargo, que involucra a una mujer joven quien supuestamente fue detenida en la calle y obligada a tener relaciones sexuales con él.
Taylor Dolven reportera del Miami Herald, contribuyó a esta información.
Fuente: elnuevoherald.com