La líder de Hong Kong ha invocado poderes de emergencia raramente utilizados para prohibir a las personas usar máscaras faciales durante las asambleas públicas, una medida que probablemente enfurezca a los miles de jóvenes involucrados en un movimiento de protesta que ha durado meses.
La prohibición entrará en vigencia el 5 de octubre, anunció Carrie Lam, líder de Hong Kong, en una conferencia de prensa el viernes, luego de una reunión especial de su gabinete, el Consejo Ejecutivo.
En anticipación del anuncio, cientos de personas marcharon por el distrito comercial central de Hong Kong en protesta contra la prohibición. Se planean más protestas para la noche.
Lam dijo que la orden de promulgar el “Reglamento de prohibición de cubrirse la cara” era una “decisión necesaria”, pero insistió en que no significa que Hong Kong se encuentre en estado de emergencia.
“Ahora estamos en un riesgo público bastante grande y serio. Es esencial para nosotros detener la violencia y restaurar la calma a la sociedad lo antes posible”, dijo. “Creemos que la nueva ley creará un efecto disuasorio contra manifestantes enmascarados”.
Lam dijo que no fijará una fecha para anular la ley antimáscara.
La gran mayoría de las personas que han asistido a las recientes manifestaciones prodemocráticas de la ciudad lo hacen con máscaras para ocultar su identidad, temerosos de que la policía pueda arrestarlos o agredirlos. Las máscaras antigás y los respiradores para proteger contra el gas lacrimógeno, que a menudo usan las autoridades para dispersar reuniones no autorizadas, también se han convertido en algo común.
Con el fin de promulgar dicha prohibición, la Oficina del Jefe Ejecutivo invocará la Ordenanza de Reglamentos de Emergencia de la era colonial de la ciudad, que otorga al gobierno amplios poderes de emergencia.
La legislación no se ha utilizado en más de medio siglo y le da a Lam el poder de eludir a la legislatura de la ciudad para “hacer cualquier regulación que él (o ella) considere conveniente para el interés público”. Lam dijo que la nueva ley era una legislación subsidiaria y que será debatida por el Consejo Legislativo, donde los partidos progubernamentales tienen mayoría, cuando se reúnan a fines de este mes.
Introducida en 1922, la ley se utilizó por última vez en 1967 durante los disturbios izquierdistas, que fueron seguidos por una campaña de atentados terroristas en Hong Kong y enfrentamientos entre manifestantes y policías. Cincuenta y un personas murieron durante la agitación, incluidos 10 policías.
La nueva ley prohíbe a las personas usar revestimientos faciales que oculten su identidad, incluida la pintura, en protestas no autorizadas o autorizadas, o en procesiones públicas. Los declarados culpables enfrentan hasta un año de prisión y una multa de HKD $ 25.000 (US$ 3.100).
Lam dijo que la regulación contiene exenciones para las personas que tienen razones legítimas para usar cubiertas faciales, como por ejemplo para fines religiosos, médicos o profesionales.