Se aprobó asilo político en EE.UU. a polizón cubano Yunier García Duarte

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Un juez de Inmigración otorgó este martes el asilo político solicitado por el polizón cubano Yunier García Duarte, quien llegó a Miami escondido en la bodega de un avión procedente de La Habana, el pasado 16 de agosto, según confirmó su abogado Willy Allen.

“Ganamos, ganamos”, acoto el letrado a  quien agregó que “para mí es una victoria, también para mi cliente y es una victoria para el sistema legal independiente, donde los jueces pueden tomar decisiones al margen de lo que quiera el Gobierno”.

Tras la decisión del juez, Allen planea pedir la liberación inmediata del joven de 26 años, que todavía la noche de este martes se encontraba recluido en el centro de detención de Krome. «A primera hora del miércoles voy a pedir que lo dejen en libertad, aunque yo sé que esto será un poco complicado», sostuvo.

Sin embargo, dijo Allen, el fiscal del caso que representa al Gobierno de EEUU tiene 30 días para presentar una apelación al fallo que beneficia al exempleado del Aeropuerto Internacional José Martí de La Habana, que huyó aduciendo falta de libertades y las pésimas condiciones de vida existentes en la isla.

El 11 de septiembre pasado, García había asistido a una audiencia final que tomó tres horas y media. Allen dijo que en ese momento su cliente testificó durante unos 90 minutos y que “presentó muy bien su caso alegando persecución futura si regresa a Cuba”.

Allen señaló que el abogado que representa a la Fiscalía en este proceso se ha opuesto a que García obtenga asilo político, a quien considera un “delincuente que violó la ley de su país y la de Estados Unidos”, acorde con el letrado.

«El juez determinó que hacía lo justo al otorgarle esta protección a Yunier, porque si es devuelto a Cuba, el joven puede ser objeto de persecución por parte de la dictadura cubana, que se iba a ensañar con él como un castigo ejemplarizante», anotó.

El asilo político es la única opción que tiene García Duarte para evitar su deportación a la isla y quedarse legalmente en Estados Unidos, dado que no puede beneficiarse de la Ley de Ajuste Cubano, por la forma cómo ingresó a territorio estadounidense.