Nintendo lanzó este viernes al mercado su nueva consola, la Switch Lite, más compacta y ligera que su anterior modelo y que está diseñada únicamente para la modalidad portátil.
El nuevo modelo sale en tres colores -amarillo, gris y turquesa- y tiene un precio de salida de unos 200 dólares en el mercado americano y alrededor de 220 euros en el español.
La nueva consola tiene los mandos integrados -no cuenta con los Joy-Con extraíbles- y no se puede conectar al televisor como sucede con Nintendo Switch, que fue lanzada en marzo de 2017 y ha sido todo un éxito para la compañía.
La ausencia de los mandos Joy-Con elimina las opciones de vibración HD y cámara infrarroja de movimiento, que disponía el anterior modelo.
La pantalla de la nueva consola también es más pequeña que su predecesora: tiene un tamaño de 5,5 pulgadas -frente a las 6,2 de Switch-, pesa menos -unos 275 gramos-, y su batería dura entre 3 y 7 horas dependiendo de los videojuegos que se activen.
Todos los títulos del catálogo de Switch de la compañía japonesa estará disponible para este nuevo modelo, aunque algunos juegos podrán tener restricciones.