Los jóvenes de Fridays for Future se manifestarán este viernes ante las Embajadas de Brasil de todo el mundo, entre ellos en la sede de la delegación diplomática en Madrid a las 12.00 horas, para protestar por los incendios que están devastando la selva del Amazonas y que avanzan a una velocidad que califican de «alarmante».
«Nuestra casa está literalmente en llamas y los pulmones de nuestro planeta se están convirtiendo en cenizas», alertan los jóvenes en un comunicado en el que llaman a la participación en la protesta y en el que señalan que estos incendios son solo uno de los últimos ejemplos múltiples de la crisis climática.
Así, advierten de que el planeta se precipita hacia una «serie incontrolable de eventos» que destruirán los ecosistemas y la vida en el planeta.
Fridays for Future relaciona el aumento de los incendios en Brasil con la llegada a la presidencia del país de Jair Bolsonaro, a cuyo Gobierno acusa de ver el Amazonas «solo como una bolsa de dinero».
Durante su huelga de este viernes, expresarán al Gobierno del país suramericano su «consternación y enfado» por las políticas del Ejecutivo que «aceleran enormemente» la crisis climática y exige a Bolsonaro que se alinee con los objetivos de Fridays for Future.
Por último, manifiestan su solidaridad con el pueblo de Brasil y especialmente con las comunidades de primera línea y los pueblos indígenas, que son los más afectados por la destrucción de los bosques amazónicos.
«Este no es un problema local solo, sino un problema que tiene repercusiones globales y, por lo tanto, instamos a los políticos de todo el mundo a tomar medidas y denunciar la destrucción de este ecosistema esencial», insiste.
Desde Fridays for Future Brasil (FFF), Daniela Borges ha reclamado un Gobierno que reconozca la importancia de la naturaleza y que se comprometa a proteger las mayores riquezas naturales.
Por su parte, Alejandro Martínez, de FFF España, recuerda que el Amazonas es «uno de los pocos pulmones que sigue teniendo el planeta, que ayuda a seguir luchando contra la emergencia climática».
«Lo que estamos viendo no es un proceso natural, es el resultado de la acción del hombre, de las quemas provocadas para deforestar un terreno para así poder explotarlo economicamente. El gobierno de Brasil no ha actuado, ni tiene intención de hacerlo, antes está emergencia, que si no se combate dejará una cicatriz imborrable en uno de los lugares con mayor biodiversidad de nuestro planeta», concluye.
Fuente: Diario las Américas