El acusado aseguró que quiso jugarle una broma al pequeño, sin embargo todo salió distinto a lo que había planeado debido a que el niño terminó muy asustado e incluso temblando luego de escuchar las detonaciones tan cerca, según informó ABC Action News.
Un hombre identificado como Matthew Morrison, quien es oriundo del condado de Okaloosa, se encuentra acusado de crueldad infantil sin grandes daños, robo y posesión de una sustancia controlada, por lo que fue detenido por los efectivos de la policía para realizar más investigaciones sobre el caso y esperar la sentencia o castigo del juzgado.
Durante el pasado sábado en horas de la mañana, el hombre de 44 años de edad quiso jugarle una broma a un niño que se encontraba dormido, entrando sin permiso a su casa y colocando varios petardos por debajo de la cama, que posteriormente accionaron, pero sin hacer daño por mucha fortuna, aunque asustando de gran forma al joven de apenas 9 años, quien expresó en el interrogatorio policial que tal broma le había hecho llorar y temblar.
Morrison vivía en las afueras de una casa en Godfrey Street, específicamente en una tienda de campaña. Al momento de dicho suceso, el dueño de la casa salió con un palo para sacar al acusado, pero cuando llegó la policía la situación quedó peor: el hombre tenía en su bolsillo dos gramos de metanfetamina, por lo que llevaron a la comisaría, asegurando incluso que fue una «broma que salió mal».
Fuente: Miami Diario