El presidente Donald Trump ha anunciado que el próximo lunes 18 de febrero dedicará un discurso a la grave situación que enfrenta Venezuela.
El presidente de los Estados Unidos estará el lunes en el campus Modesto A. Maidique, de la Universidad Internacional de la Florida (FIU por sus siglas en inglés), en Miami, donde se espera que su discurso sea otro paso contundente para el apoyo a Juan Guaidó, reconocido por Washington y más de 40 países como el presidente interino. Además, este discurso ejercería aún más presión sobre el régimen de Nicolás Maduro.
Una fuente de la Casa Blanca informó hoy a Efe de los planes de Trump, quien visitará la universidad después de pasar el fin de semana en su club privado de Mar-a-Lago, en el estado sureño.
«El lunes, 18 de febrero, el presidente Donald J. Trump hablará ante la Universidad Internacional de Florida sobre los acontecimientos en Venezuela y los peligros del socialismo. El presidente también reafirmará su apoyo al presidente interino Juan Guaidó», dijo la fuente, que pidió el anonimato.
«El Gobierno venezolano y su pueblo están viviendo un momento crucial en su historia, y apoyamos su búsqueda de libertad e independencia», añadió.
Por estos días, el propio dictador Maduro ha negado que Venezuela enfrente una crisis, y ha rechazado enérgicamente la ayuda humanitaria que está en el cruce fronterizo de Cúcuta, en Colombia, lista para entregarse a miles de venezolanos.
Guaidó ha asegurado que esa ayuda comenzará a entrar en Venezuela el próximo 23 de febrero, pero no está claro cómo podrá garantizarse su ingreso.
Trump se reunió este miércoles en Washington con el presidente colombiano, Iván Duque, y no descartó un posible despliegue militar en Colombia, además de presumir de que su estrategia en Venezuela tiene «un apoyo tremendo en toda Sudamérica y en todo el mundo».
Además, en su discurso sobre el Estado de la Unión este mes, Trump arremetió contra las «políticas socialistas» de Maduro, que «han hecho que esa nación pase de ser la más rica de Sudamérica a quedar en un estado de pobreza extrema y desesperación», y prometió que EEUU «nunca será un país socialista».
FUENTE: DLA/EFE