Caso Kavanaugh Reabrió viejas heridas del voto partidista

981

(Miaminews24).- La vieja práctica del voto partidista vuelve a decidir otro asunto importante para la nación. El juez Brett Kavanaugh, nominado por el presidente, Donald Trump, al Tribunal Supremo fue finalmente “recomendado” por un comité del Senado que debía evaluar su candidatura, pese a las múltiples acusaciones de abuso sexual.

La mayoría simple republicana sumó los 11 votos necesarios para imponerse a los 10 demócratas, un día después que se escucharan las acusaciones sobre hechos que ocurrieron hace 36 años.

Con este voto favorable al juez, ese comité recomienda la candidatura de Kavanaugh al pleno del Senado, que tendrá que reunirse para tomar la decisión final, no sin antes tener que someterse a una investigación del FBI.

De hecho, el magistrado superó el paso clave y crítico que ahora sirve como termómetro sobre la postura que podría tener el resto de la Cámara Alta de cara al voto de confirmación final, según reportaron varios medios de prensa, incluyendo la agencia de noticias Efe.

Kavanaugh negó rotundamente las acusaciones y se mostró desafiante a las preguntas.

Queda preguntar, tal como se preguntan todos, si las acusaciones son tan graves como verdaderas o están ligadas a algún tipo de conspiración política.

“No quiero dudar ni dudo de la honestidad de las denunciantes. Sé que las mujeres han sido abusadas durante siglos y muchas callaron por temor o pudor”, señaló el abogado Luis Martínez, del bufete Martinez & Associates.

Sin embargo, a muchos molesta o preocupa que la denuncia haya demorado tantos años para salir a la luz y sea expuesta precisamente ahora, cuando el supuesto incriminado está a punto de ser nombrado juez vitalicio de la Corte Suprema.

“Lo mejor es hacer una investigación. El FBI sabe cómo cuestionar y llegar a la verdad. Si no lo hacen, siempre existirá la duda”, opinó Martínez.

Antecedentes

Medio país y los medios de prensa internacional estuvieron al tanto de la audiencia en el Congreso, que fue transmitida en directo por televisión.

El senador republicano Jeff Flake, fuerte crítico del Presidente, dudó sobre su voto y reclamó que el pleno del Senado se demore al menos una semana, con el fin de dar tiempo al FBI a investigar las acusaciones.

Minutos antes, Flake había sido increpado duramente ante las cámaras de televisión por una víctima de agresión sexual que lloraba desconsoladamente.

“¿Qué le está diciendo a todas esas mujeres? ¿Qué me está diciendo a mí? Míreme cuando le hablo. Me está diciendo que mi agresión no importa, que lo que me pasó no importa y que va a llevar a quien hace estas cosas al poder. Eso es lo que me está diciendo cuando vote por él. No aparte la mirada de mí», le dijo la mujer.

Trump se pronunció sobre el tema después de terminar la audiencia en el Senado y reiteró que no se plantea otro candidato.

«Confío en todos, incluyendo el senador (Chuck) Grassley (jefe del Comité Judicial del Senado) que está haciendo un gran trabajo. Es una decisión que tomarán ellos y sospecho que la tomarán pronto», comentó el mandatario en la Casa Blanca, donde aseguró que dejará al Senado que gestione la situación.

Acusaciones

Kavanaugh ha sido acusado por tres mujeres de abusos cometidos hace décadas, entre ellas Christine Blasey Ford, quien asistió a la Cámara Alta para contar cómo el ahora juez supuestamente intentó violarle en 1982.

Esta profesora de estadística de la Universidad de Palo Alto, en California, señaló a Kavanaugh como autor de un intento de violación.

Ford , relató en el Senado que en 1982, cuando ella tenía 15 años, el hoy juez, dos años mayor, y un amigo llamado Mark Judge la metieron en una habitación a la fuerza. Una vez allí, Kavanaugh supuestamente se subió sobre ella y trató de desvestirla mientras le tapaba la boca para contener sus gritos.

Durante la última sesión, los demócratas acusaron a los republicanos de «ignorar» a la supuesta víctima de abusos, que tuvo que comparecer en público y ante un comité con abrumadora mayoría de hombres, e incidieron en la necesidad de que el FBI investigue las alegaciones.

En este sentido, la líder demócrata en el comité, Dianne Feinstein, criticó también la comparecencia de Kavanaugh, en la que él se mostró desafiante.

«Nunca he visto a un nominado para cualquier posición comportarse de esa manera. El juez Kavanaugh empleó una retórica tan politizada como mis compañeros republicanos. Y más importante, fue a la ofensiva», enfatizó la progresista sobre el juez, quien ayer llegó a pedir perdón por algunas de sus respuestas.

Los republicanos basan la defensa del juez en la ausencia de pruebas materiales o la corroboración de testigos, mientras que los demócratas claman por detener el proceso, llamar a testificar a testigos y dejar que el FBI investigue.

Ford pasó una prueba de polígrafo y se muestra dispuesta al proceso de investigación. También la American Bar Association, la gran asociación profesional de abogados de Estados Unidos, ha pedido una investigación federal antes de aprobar la candidatura de Kavanaugh a un puesto vitalicio tan crucial como es la Corte Suprema de la nación.

Resumen

Al final, el caso Kavanaugh ha vuelto a reabrir las viejas heridas del voto partidista. Hace apenas 27 años un caso similar sacudió al país: el juez Clarence Thomas fue nominado a la Corte Suprema por el entonces presidente George Bush y fue acusado de acoso sexual continuado por una exsubordinada suya, Anita Hill, pero terminó confirmado al puesto de mayor magistrado.

Aquellos legisladores no creyeron a Hill ni convocaron una investigación abierta del FBI para aclarar las sombras del hoy miembro del máximo organismo judicial.

Los senadores republicanos aceptaron hoy la petición de los demócratas para que el FBI investigue a Brett Kavanaugh, el nominado por el presidente., Donald Trump, para el Tribunal Supremo, por las acusaciones de abusos.

Hoy, gracias tal vez a una dosis de razonamiento oportuno, la Cámara Alta accedió a la exigencia de que el FBI inicie las averiguaciones sobre las acusaciones.

Fuente:DLA