El gobernador Ron DeSantis, firmó el proyecto de Ley SB 1718 que toma medidas contra la inmigración en Florida.
La legislación aprobada ha sido considerada discriminatoria y extrema, ya que en sus disposiciones penalizan a inmigrantes irregulares; también a aquellas personas que los transporte a Florida o los que empleen a estos.
Florida cuenta con nueva Ley de inmigración aprobada por DeSantis
La Cámara de Representantes de Florida dirigió a DeSantis el pasado 03 de mayo, el proyecto de ley SB 1718 en la espera de ser firmado por el gobernador. Esta nueva medida obtuvo 83 votos a favor y 36 en contra.
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La nueva ley de inmigración de Florida firmada por DeSantis, cuenta con 43 páginas donde se prohíbe que los condados y municipios provean fondos a cualquier persona, entidad u organización para que otorgue documentos de identificación a indocumentados.
Entre estas disposiciones, también se estipula multas a empleadores que contraten a personas sin una documentación legal. Para verificar que se cumplan todo el reglamento establecido, se hará uso del Sistema E-Verify; este permite a las empresas confirmar sus potenciales empleados pueden trabajar legalmente.
Así mismo, en esta nueva ley se contempla penas de más de 10 años a quien transporte a Florida. Por otra parte, esta norma también elimina las exenciones de las matrículas educativas a personas sin una autorización legal en el territorio. Anula además, la ley que permitía a los abogados ejercer la abogacía estando en la regulación de sus estatus migratorio.
DeSantis ante la nueva ley
En palabras de DeSantis, esta medida la tomó como una respuesta a lo que él describe como un “problema masivo en la frontera con México”. Además, el gobernador criticó el control fronterizo por parte del gobierno federal.
El gobernante considera que el presidente estadounidense, Joe Biden, ha tenido una “fallida responsabilidad desde el primer día de su mandato”; DeSantis arremete a la Administración del mandatario Biden con lo que definió como una “dejadez”.
El gobernador además resalta que desde el primer momento, Florida ha tratado de “combatir los efectos de la política” de Joe Biden. Por otra parte, se especula que DeSantis podría anunciar su participación en las primarias republicanas de las que saldrá el candidato presidencial en la elecciones de 2024.
Extrema y discriminatoria
Según medios, esta ley se considera como la “Ley Antiinmigrante más extrema de EE.UU”. La nueva legislación de florida fue criticada por múltiples organizaciones comunitarias; clasificándola como discriminatoria y potencialmente inconstitucional.
La denominan como una ley que tiene como propósito el infundir el miedo en las comunidades inmigrantes del estado de Florida. La directora ejecutiva de Coalición de Inmigrantes de Florida, Tessa Petit expresó que: «Florida está penalizando a los inmigrantes por tener la mala suerte de nacer en países que están en crisis y tener el coraje de buscar la paz y la prosperidad aquí».
Petit añadió además, «¿realmente ha pensado el gobernador en lo que todo esto realmente le hará a las familias que solo intentan salir adelante?»; Mariana Blanco, ejecutiva del Centro Maya-Guatemalteco, dijo, por su parte, que el gobernador «no debería jugar con la gente por su propia agenda política. Son personas. Esta es su mano de obra» y debería protegerla, agregó.
«Como alguien que llegó a EE.UU. como asilado político de Venezuela y luego se fue a Princeton y Oxford sé cuánto tienen para dar los inmigrantes a Florida y a la nación, si se nos da la oportunidad», subrayó Samuel Vilchez, director en Florida de la American Business Inmigration Coalition.
Futuro incierto
El rechazo ante esta nueva ley de Florida firmada por DeSantis contra la inmigración irregular; se ha dado a notar por parte de grupos a favor de los inmigrantes. Estos mismos colectivos consideran que es una medida que “sólo busca infundir miedo”. Además, prevén que las consecuencias de esta norma podrían afectar a la economía estatal.
Adelys Ferro, directora ejecutiva de Venezuelan American Caucus, compartió que son más de 775.000 indocumentados los que se ven afectados por la norma SB 1718. «Nos están botando del estado», manifiesta Ferro a EFE.
Según el testimonio de la madre de unos de los 66 deportados recientemente, el joven cubano Emir Rodríguez, psicológicamente no está bien; “Él ha llorado mucho, lo siente mucho”. La madre relata el proceso de deportación del cubano:
“Los montaron en un ómnibus y le dijeron que los iban a llevar para sus provincias, pero no fue así. Los bajaron a mitad de camino y les dijeron que no había combustible”. Luego de ello, los sometieron a un interrogatorio. Les preguntaron cómo habían salido de Cuba y si habían dicho que tenían miedo a volver, cuenta la madre.
La preocupación de ser deportado acecha a quienes tienen sus citas en las oficinas del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE). Para los abogados, las personas que ya están detenidos o tienen una I-220B o una orden de deportación pendiente corren un riesgo mayor.
Con información de | EFE | Telemundo 51
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