El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, quiere evitar una «guerra fría» con China tras el derribo del globo chino y se propone hablar de ello con su homólogo chino, Xi Jinping.
El presidente se dirigió por primera vez a los estadounidenses este jueves sobre el derribo el 4 de febrero de un globo chino que realizaba una misión de espionaje. Días después ordenó destruir » objetos» por el momento no identificados.
Biden: No queremos una guerra fría con China
«No queremos una nueva guerra fría» y «seguiremos hablando con China», declaró este jueves en un breve discurso.
Te Puede Interesar: Apareció en Taiwán un supuesto globo espía chino que se desinfló en una isla
«Espero hablar con el presidente Xi y llegar al fondo de esto pero no me disculpo por haber hecho derribar el globo», agregó.
Pekín asegura que se trataba de un globo de investigación meteorológica que entró involuntariamente en el espacio aéreo estadounidense.
La decisión de destruirlo transmite «un mensaje claro», según Biden. «Cualquier violación de nuestra soberanía es inadmisible», dijo.
«Si algún objeto representa una amenaza para la seguridad de los estadounidenses, lo derribaré», insistió el presidente demócrata, de 80 años.
En cuanto a los otros tres objetos destruidos recientemente, Biden reconoció, al igual que otros funcionarios estadounidenses, que «nada por el momento» mostró que estuvieran «relacionados con el programa de globos espía de China» ni con «dispositivos de vigilancia de otro país».
«Estos tres objetos probablemente estén vinculados a empresas privadas, actividades de ocio o instituciones de investigación científica», dijo.
«Objetos»
«No tenemos pruebas de que haya habido un aumento repentino en la cantidad de objetos en el cielo», dijo, «pero los vemos más» debido en parte a un cambio en los parámetros de los radares, señaló.
El presidente dice que habló con sus aliados sobre el programa de espionaje que, según él, lleva a cabo China y que pidió un «mejor inventario» de los objetos volantes en el cielo.
Las últimas tres operaciones de derribo se llevaron a cabo en nombre de la seguridad del transporte aéreo, dado que estos «objetos» volaban a altitudes cercanas a las de los aviones.
En el caso del globo chino, la oposición republicana lo criticó por haber esperado demasiado antes de dar la orden.
Los restos de estos «objetos» voladores serán analizados para determinar su naturaleza, uso y origen, pero es difícil recuperarlos porque cayeron sobre aguas heladas o en zonas remotas, afirmó el martes John Kirby, portavoz del Consejo de Seguridad Nacional del gobierno estadounidense.
El tema ha envenenado las relaciones diplomáticas entre Estados Unidos y China, que se acusan mutuamente de espionaje.
Biden afirma que los últimos 3 objetos derribados no estaban relacionados con los programas de espionaje de China
El presidente Joe Biden se pronunció acerca de los objetos aéreos derribados sobre EE.UU. Aseguró que no buscan «una nueva guerra fría con China» y que están intentando recuperar la información que estaba en los objetos derribados.
“Biden solo derribó el globo espía chino después de que la presión pública se lo exigiera”, dijo John Barrasso, senador republicano de Wyoming, en una sesión informativa el martes. “Esta es una violación total de nuestra integridad como nación, y la indiferencia y la inacción del presidente mostraron debilidad no solo para China sino para el mundo”.
Las tensiones entre EEUU y China han sido altas desde el descubrimiento del globo que Biden ordenó derribar el 4 de febrero. Los funcionarios de la administración dicen que el dispositivo era parte de un “programa internacional de globos de gran altitud para la recopilación de inteligencia” del Ejército Popular de Liberación de China. Beijing sostiene que era un artefacto civil utilizado para la investigación meteorológica.
Incentivo para evitar la escalada
Biden tiene incentivos para evitar una escalada con China. Su administración ya está tratando de gestionar la respuesta de la OTAN a la invasión rusa de Ucrania mientras enfrenta otros desafíos de política exterior, incluidos los programas nucleares de Corea del Norte e Irán, y un Medio Oriente volátil tras la formación de un gobierno israelí de extrema derecha bajo el liderazgo del primer ministro Benjamin Netanyahu.
La administración ha comprometido más de 27.100 millones en asistencia de seguridad para Kiev desde que comenzó la guerra, el 24 de febrero de 2022, y tiene cuidado de no provocar que Beijing se ponga más del lado de Mosc
Con información de | Diario Las Américas
Obtén información al instante, únete a nuestros grupos de:
Síguenos en Nuestras cuentas de Redes Sociales
Instagram: @miaminews24official
Twitter: @miaminews24
Facebook: Miaminews24.com