Debido a la creciente ola de nuevos contagios por covid que se vive en China y las protestas por el encierro la fábrica de Apple se ha visto afectada.
El daño colateral de la pandemia le implicará a la compañía estadounidense una reducción de producción estimada en al menos 6 millones de dispositivos iPhone Pro, los cuales se esperan reponer en 2023.
La política de “Cero Covid” afecta a la fábrica de Apple en China
Desde hace varias semanas Foxconn Technology Group, no ha logrado resolver la carencia de empleados necesarios para ensamblar la producción de teléfonos móviles inteligentes que se tenían programada para el tercer trimestre del año.
El mes pasado, miles de trabajadores huyeron de la factoría a consecuencia de una severa escasez de alimentos y aunque después se contrataron a nuevos colaboradores, estos terminaron por protestar en contra del salario que percibían.
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Aunque también por las medidas sanitarias impuestas para frenar los contagios de COVID-19 que implican constantes cierres de tránsito, así como disturbios en el centro de Zhengzhou.
En la factoría dirigida por Foxconn se producen la mayoría de los dispositivos iPhone 14 Pro y Pro Max, modelos en demanda que han compensado la falta de respuesta del iPhone 14 normal.
Ya se estimaba una baja en la fabricación de los dispositivos
Cabe señalar que previo a las manifestaciones de la población en las calles de China exigiéndole alimentos a su gobierno, la multinacional financiera Morgan Stanley ya estimaba que este año el déficit del modelo iPhone Pro rondaría en 6 millones de unidades.
Así que bajo el nuevo escenario la cantidad podría incrementarse sustancialmente, lo cual plantea la posibilidad de trasladar la producción de Apple a otros países como India o Vietnam.
Con el objetivo que no se interrumpa el ensamble de teléfonos móviles en los próximos días, la compañía prometió un bono de hasta $1,800 dólares al mes dirigido a los empleados de tiempo completo que permanezcan trabajando hasta diciembre y enero.
Sin embargo, en el ambiente continúa rondando la posibilidad que la producción de teléfonos móviles no pueda enviarse a sus destinos programados, lo cual implicaría un déficit de hasta 20 % en los objetivos trazados para el tercer trimestre.
La economía china no puede soportar mucho más la política de “Covid Cero”
No todas las empresas han pasado apuros en la era del Covid cero en China. Andon Health, una empresa que cotiza en Shenzhen y que fabrica pruebas de Covid y dispositivos médicos.
Por ejemplo, registró un aumento del 32.000 % en los beneficios netos en el tercer trimestre del año, en comparación con el mismo período de 2021, debido que produjo dispositivos de prueba para China y América.
Las 35 mayores empresas productoras de pruebas de Covid-19 obtuvieron unos ingresos de 150.000 millones de yuanes (21.000 millones de dólares) en el primer semestre de 2022, acuñando una nueva generación de magnates de la pandemia.
Pero fuera del complejo Covid-industrial de China, la economía está sufriendo. Los cierres y las onerosas restricciones a la circulación han frenado la confianza de los consumidores y el crecimiento económico.
En los últimos quince días han inspirado protestas en todo el país, y las tensiones se intensificaron durante el fin de semana.
El 27 de noviembre, los jóvenes de las calles de Shanghai rechazaron la perspectiva de los interminables controles y cierres, coreando: “No queremos pruebas de Covid; queremos libertad”.
Acciones de China para librarse del virus
Los efectos económicos del intento de China de librarse del virus nunca han sido tan claros. El movimiento de personas se ha visto gravemente restringido.
Durante la semana del 14 de noviembre, a medida que aumentaban los casos de covirus, el número de vuelos nacionales se redujo en un 45 % interanual.
Las tres mayores compañías aéreas de China perdieron en conjunto 74.000 millones de yuanes en los primeros nueve meses de 2022.
El tráfico de metro en las diez mayores ciudades de China descendió un 32 % interanual, según Macquarie, un banco de inversión australiano.
Los ingresos de las taquillas, un indicador de la disposición de la gente a salir de casa, cayeron un 64 %.
Sólo el 42 % de los cines chinos estaban abiertos el 27 de noviembre. Algunos de los cines más grandes han cerrado por completo.
Con información de | La Opinión | Infobae
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