Múltiples son acuerdos que Estados Unidos sostiene con su vecino país México, y uno de los vitales es el tema energético el cual está a punto de desencadenar un conflicto entre estos países; conozco cuales son los motivos de estas diferencias
El viernes pasado en horas de la mañana, Andrés Manuel López Obrador el presidente de México, hizo saber durante su conferencia de prensa diaria que estaba feliz, feliz, feliz. La razón de su alegría: el fallo de la Corte Suprema mexicana que el día anterior.
Dicho fallo es válido constitucionalmente; las reformas al sector eléctrico que el presidente considera cruciales para cumplir con los propósitos de su mandato.
Respuestas ante duscputa entre Estados Unidos y México por conflicto energético
El embajador de Estados Unidos en México reaccionó al dictamen de la Corte mexicana afirmando en un comunicado en la ciudad de México que; Estados Unidos está comprometido a trabajar con México para crear una fortaleza energética; que lleve al mundo a combatir la crisis climática y a producir nueva energía limpia.
Todo esto suena normal, hasta que usted se da cuenta que la reforma que quiere el presidente López Obrador; es para poner todo el sistema generador de energía eléctrica en manos del estado.
Y que el embajador está hablando de que en esa generación de energía eléctrica; Estados Unidos está esperando que continúe habiendo espacio para que la industria privada de Norteamérica; participe también en las reformas creando energía limpia.
Eso incluye a las industrias privadas de generación de nueva energía limpia de Canadá, Estados Unidos y México.
Como esta reforma aún está por debatirse en el congreso mexicano, es posible que en la definición que resulte; haya espacio para crear energía limpia y nueva. Pero hasta ahora las indicaciones son que la reforma será; solamente para refrendar que la generación de energía será la misma que ha sido desde el 27 de septiembre de 1960.
Ese día, en un acto político el gobierno mexicano puso en manos del pueblo de México; y de los sindicatos de trabajadores de la electricidad, la generación de la energía eléctrica. México estuvo en todo su derecho de hacerlo; pero desde entonces el mundo ha cambiado y ha avanzado.
La generación de la industria eléctrica mexicana se ha quedado en el mismo sitio, de México no llegar a un acuerdo pronto con Estados Unidos, se producirá un conflicto de términos en este ambito que pondría quizás en un hilo otros tratados.
Décadas de comercio por temas energeticos y gas.
A México le convendría generar nueva energía eléctrica de fuentes renovables. Porque hoy para generar electricidad necesita pagarle a Estados Unidos; miles de millones de dólares para comprar el gas natural con el que genera esa electricidad.
Déjeme contarle algo que a mediados de los años 90 ‘s al emitirse el Tratado de Libre Comercio de Norteamérica; le ocurrió a “Bud Antle”, una empresa agrícola de las mayores de California.
Para aprovechar el nuevo acuerdo, esta compañía cerró sus operaciones en EE. UU. y se mudó al centro de la República Mexicana; en donde sembrar y cosechar vegetales sería considerablemente más barato.
Bud Antle iba a México decidida a crear empleos y a generar riqueza para los mexicanos y para la empresa en California. La compañía hizo una enorme inversión en capacidad instalada en México; y todos pensaron que las lechugas, la col; y el apio que se comerían en Norteamérica se produciría en los estados del centro de México.
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Pero a los dos años de la mudanza Bud Antle anunció el cierre de sus operaciones y su regreso a California. El problema, sus equipos de irrigación y de congeladores se descomponían todos los días debido a lo inconsistente de la corriente eléctrica; que la compañía le compraba a la Comisión Federal de Electricidad. Esa corriente, a veces era muy baja, a veces subía tanto de repente que fundía al equipo; que había sido fabricado para operar en sitios con energía eléctrica uniforme.
Quienes vieron de cerca esta tragedia en la que no había ganadores; se preguntaron entonces, ¿cómo era posible que en 30 años la Comisión Federal de Electricidad, CFE; no pudiera generar una corriente constante?.
Esta cuestión técnica, era ahora muy importante porque el Tratado Comercial de Norteamérica; anticipaba que cientos de empresas de EE. UU. y Canadá ampliarían sus operaciones en territorio mexicano.
Preocupación por desarrollo del sur de México.
El presidente López Obrador nació en Tabasco. No hay nadie que conozca todo esto más a fondo que él; por eso el presidente ha sido el mayor impulsor del sureste mexicano que sigue en el atraso.
Gobiernos vinieron y se fueron y a nadie se le ocurrió desarrollar ese enorme potencial. El problema del sureste de México, que se extiende desde Veracruz hasta Yucatán; es su clima de mucho calor y alta humedad.
Una forma de impulsar el desarrollo en esa vasta zona es con aire acondicionado. Pero, en México el aire acondicionado es muy caro. Otra vez, culpa de la generación ineficiente de energía eléctrica.
Hasta ahora todo hace pensar en Estados Unidos que el presidente López Obrador, no quiere abrir el sector eléctrico de México a una competencia que incluya a empresas estadounidenses creando energía eléctrica renovable.
Por eso, para el gobierno en Washington, la reforma eléctrica mexicana aumenta la incertidumbre regulatoria, limita la libre competencia y asesta un duro golpe a la inversión privada en el sector energético y al uso de energías renovables como la solar y la creada por el viento.
México siempre ha defendido su soberanía, y ese es su derecho. Pero Estados Unidos no considera que insistir en que se cumplan los capítulos del Tratado de Libre Comercio del que más del 80% de la economía mexicana depende, atente contra la libre voluntad de gobierno de los mexicanos.
Simplemente se trata de abrir operaciones comerciales del sector privado en la generación de nuevos tipos de energías eléctricas en la que todas, incluidas las empresas mexicanas, participen.
«Nadie en Estados Unidos intenta robarle a México nada».
La enorme felicidad que le causó el fallo de la Corte Suprema al presidente de México; fue porque declaró constitucional la reforma a la industria eléctrica en lo general. Pero, falta aún determinar; el efecto de la reforma en renglones específicos que están relacionados con el Tratado Comercial de Norteamérica; y eso deberá ser definido con nuevas decisiones jurídicas.
Faltan decisiones determinantes para evitar un verdadero conflicto entre Estados Unidos y México.
- – La compatibilidad de la reforma eléctrica con los tratados internacionales en materia ambiental y económica.
- – Cuáles serán los mecanismos de certificación de las energías limpias;
- – Los fallos jurídicos finales sobre la renovación y revocación de los permisos otorgados a compañías extranjeras por el gobierno anterior de Enrique Peña Nieto, cuando no sólo se invitó, sino que se alentó a que compañías extranjeras invirtieran en México con capacidad instalada para crear energía limpia.
Eso le explica a usted porque el comunicado del embajador Ken Salazar de Estados Unidos incluye un renglón crucial que dice… “Estamos preocupados que la reforma eléctrica mexicana del 2021 abra la puerta a más litigios legales”.
La decisión de la corte Suprema ocurre cuando en todo México existe el clima de negocios más frágil de los últimos 50 años. Por eso, el sector privado de México y de Estados Unidos argumenta con una misma voz; que las reformas propuestas por López Obrador amenazan las inversiones de miles de millones de dólares.
Otros argumentos que se exponen en este caso.
Argumentan también, que violan los acuerdos comerciales y que eso conducirá a que México y los mexicanos continúen, con una energía eléctrica ineficiente manejada por el estado.
Hay para México una consecuencia adicional, la incertidumbre política que ya afectó la confianza empresarial; a las empresas no les gusta operar en ambientes de incertidumbre legal y eso siempre lleva a desalentar la inversión privada.
Qué es exactamente lo que ocurrió. México, en la misma semana, perdió su sitio entre las 25 economías más confiables para invertir en el planeta.
Empresarios preocupados por convenios de USA – México.
Numerosas empresas han presentado ya impugnaciones contra la ley. Y ahora la consecuencia directa del fallo de la Corte Suprema, significa que el destino tendrá que decidirse en tribunales menores, con cada juez libre para tomar sus propias decisiones.
Cuando los mercados energéticos de México se abrieron a más inversión privada bajo el gobierno anterior. López Obrador se levantó como el más feroz crítico de las reformas, argumentando que eran demasiado favorables a las empresas privadas; y obstaculizaban a las empresas del estado.
Después hizo más duro su discurso y acusó a las compañías extranjeras; de robar en México al referirse a Estados Unidos y a otros países ha dicho que México. Ya no es tierra de conquista ni está ya de rodillas ante nadie.
La cámara de diputados en México discutirá y votará ahora la reforma energética constitucional propuesta por López Obrador. Los cambios también incluirán la nacionalización del litio y la garantía a la estatal CFE del 54 por ciento del mercado.
La peor incertidumbre que esta reforma y posible conflicto causa, tanto en México como en Estados Unidos; es si esto se convertirá en una carga regulatoria adicional; si limitará la libre competencia y si terminará asestando un duro golpe a la inversión privada del sector energético.
Y lo peor, si sacará a México de la transformación mundial de las nuevas energías renovables; que están dejando atrás a las que contribuyen a ensuciar el ambiente; al calentamiento global y al cambio de clima.
Con información de | Los Ángeles Times en Español.