A una semana de la Navidad se multiplican nuevamente las restricciones en el mundo ante la variante ómicron del coronavirus; con la cancelación de festividades o el cierre de sitios culturales, mientras crece la presión sobre los no vacunados.
La variante, identificada hace un mes en Sudáfrica, ha sido detectada en cerca de 80 países y avanza aceleradamente en Europa; donde podría convertirse en dominante para mediados de enero, según la Comisión Europea.
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Varios países europeos reforzaron las medidas sanitarias al acercarse las fiestas de fin de año o están a punto de hacerlo.
Gran Bretaña informó el sábado de un aumento en los casos de la variante ómicron del coronavirus, y el alcalde de Londres declaró un «incidente importante»; que permite una coordinación más estrecha entre las diferentes agencias públicas y posiblemente mayor apoyo del gobierno central; ya que las admisiones hospitalarias por COVID-19 en la ciudad aumentaron casi un 30% esta semana.
El total de contagios de ómicron registrados en todo el país llegó a casi 25,000 el viernes, un alza de más de 10,000 casos en 24 horas; dijo la Agencia de Seguridad Sanitaria del Reino Unido (UKHSA) en sus últimos datos.
En Francia, el gobierno pidió a las alcaldías cancelar los conciertos y fuegos artificiales previstos para la noche de Año Nuevo. En París se anunció este sábado la anulación de celebraciones en los Campos Elíseos.
Con información de: Rt Español. / Foto: Cortesía.
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