En Alemania, la protesta de los opositores a la política de coronavirus del gobierno se intensificó el miércoles finalizando con al menos 200 detenidos y la policía utilizando cañones de agua para disolver las aglomeraciones, según la fuerza policial de Berlín.
Mientras los legisladores en el parlamento alemán votaban para enmendar la Ley de Protección contra Infecciones del país, que establece las restricciones destinadas a frenar la propagación del COVID-19, miles protestaban en la capital, acusando al gobierno de usar la ley para restringir los derechos básicos y establecer una «dictadura de la corona».
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Si bien Alemania no impuso un bloqueo a nivel nacional, todos los gobiernos estatales y locales han impuesto restricciones a los viajes y las actividades de ocio cerrando negocios no esenciales. Las escuelas y las guarderías permanecen abiertas. Se requieren máscaras en todos los lugares públicos de todo el país, también según las leyes estatales.
Las enmiendas a la ley nacional aprobadas por los legisladores el miércoles tenían la intención de aclarar qué medidas de protección pueden ordenar los gobiernos estatales.
Para evitar perturbar la sesión parlamentaria, el Ministerio Federal del Interior había ordenado extensos cordones alrededor del Bundestag o parlamento.
Alemania protesta contra las normas contra el COVID-19
Entre 5.000 y 10.000 personas se reunieron en el distrito gubernamental de Berlín, según estimaciones policiales, para protestar contra las medidas.
La policía dijo que la mayoría de los manifestantes se negaron a adherirse a las reglas de distanciamiento social o usar máscaras según lo requerido, a pesar de las reiteradas solicitudes, por lo que los oficiales pidieron a los organizadores que pusieran fin a las manifestaciones.
La policía de Berlín dijo que los agentes fueron atacados con botellas; petardos, piedras y gas pimienta, lo que provocó la decisión de traer cañones de agua para disolver las protestas.
Se desplegaron hasta 2.200 agentes de policía, incluidos agentes traídos de otros nueve estados alemanes y de la policía federal.
Rainer Wendt, presidente del sindicato de la policía alemana; dijo que esperaba que el despliegue policial durara «muchas horas» para disolver las asambleas repartidas por el centro de Berlín; incluida una frente a la emblemática Puerta de Brandenburgo, donde dijo que «los manifestantes estaban de mal humor. «
Los escépticos del coronavirus han difundido teorías de conspiración sobre el virus y las vacunas que se avecinan durante meses; organizando protestas como la del miércoles a través de las redes sociales. En una manifestación a principios de este año, cientos de manifestantes traspasaron una barrera y llegaron a la entrada del parlamento antes de ser rechazados.
Hace unas semanas, las manifestaciones en Leipzig y Frankfurt se tornaron violentas; con enfrentamientos entre manifestantes y la policía y alrededor de una docena de arrestos.
Redacción de MiamiNews24 con información de CBS
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