Las playas de Broward en especifico de Fort Lauderdale estarán cerradas durante el fin de semana del 4 de julio, dijo el domingo por la tarde el alcalde de la ciudad, Dean Trantalis. Se espera que los funcionarios del condado de Broward anuncien el lunes que todas las playas públicas del condado cerrarán a partir del 3 de julio.
Los cierres de playas se deben al último aumento en ambos condados de casos COVID-19, especialmente entre un grupo demográfico más joven. El coronavirus en el estado y el país continúa aumentando.
«Lo más importante en la ciudad de Fort Lauderdale es garantizar que este virus no se propague tanto como antes», dijo Trantalis.
Empresas abiertas
Hizo hincapié en que, si bien las playas de Fort Lauderdale permanecerán cerradas del 3 al 5 de julio, las empresas a lo largo de A1A permanecerán abiertas «siempre y cuando cumplan con las reglas», dijo.
También diferente este año, el gran espectáculo de fuegos artificiales de Fort Lauderdale en la playa no sucederá. En cambio, cuatro exhibiciones de fuegos artificiales más pequeños se dispersarán por la ciudad para que los residentes disfruten desde sus hogares.
El alcalde Carlos Giménez anunció el viernes que no se permitirá a nadie en las playas del condado de Miami-Dade del 3 al 7 de julio , lo que significa que las playas del condado de Broward abrirían dos días antes que las de Miami-Dade.
Distanciamiento social
“Puedo prever un cuatro de julio donde hay multitud de personas en la playa, muy difícil mantener el distanciamiento social, las personas que se juntan, especialmente los jóvenes que se juntan. Ahora vemos que este virus prevalece en este grupo de edad y queremos mantenerlo bajo ”, dijo Giménez.
Giménez dijo que también está enviando una advertencia severa con anticipación, que si la gente no cumple con las restricciones del 4 de julio, está dispuesto a cerrar las playas aún más.
«Quiero enfatizar que extenderé este orden y mantendré las playas cerradas después del 7 de julio si no vemos que la gente se lo tome en serio».
Trantalis citó las preocupaciones sobre la incapacidad de proporcionar cumplimiento en la playa con respecto al distanciamiento social y las grandes multitudes que se congregan durante lo que es notoriamente un fin de semana festivo ocupado.
«Sentimos que no podremos proporcionar el ambiente seguro necesario que todos tienen derecho a disfrutar cuando vengan a nuestras playas», dijo.