A pesar de todos los daños personales y financieros que ha causado la pandemia de coronavirus, también ha dado un nuevo impulso a lo que había sido una tendencia lenta hacia hogares más saludables. Y es fácil ver por qué. A medida que nos quedamos en casa para evitar la contaminación, tendemos a preocuparnos, no solo por los peligros externos, sino también por cuán seguros estamos dentro de nuestras viviendas y qué podemos hacer para protegernos.
«Nos sentimos amenazados por nuestra propia seguridad personal debido a la pandemia, así como por la de nuestros familiares cercanos», dice la psicóloga conductual Mary Campbell, quien también es alcalde de Hermosa Beach, California. “Y lo mejor que podemos hacer es descubrir cómo manejarlo. Cuando estamos en ese estado, todo lo que queremos es un salvavidas «.
La vida sana y sostenible ha sido un cambio de crecimiento lento en la construcción de viviendas y el diseño comunitario en los últimos años, según John Burns Real Estate Consulting en Irvine, California. Piense en los jardines comunitarios, el movimiento de la granja a la mesa, el estado físico bajo demanda, etc.
Ahora, el grupo Burns cree que el movimiento se tambaleará «hacia la hipervelocidad», según un reciente comunicado de prensa, y la última investigación de Green Builder Media parece confirmarlo.
Al rastrear el contenido web y de redes sociales, el ala de investigación de la compañía, Cognition Smart Data, descubrió que la cantidad de discusiones específicas sobre salud y bienestar se ha inclinado «exponencialmente» más alto.
Al principio, las discusiones fueron negativas, con preocupación sobre COVID-19. Pero ahora, las personas hablan de minimizar su riesgo y mantenerse saludables.
«La gente está buscando formas de dejar de lado la esperanza y el optimismo», dice Sara Gutterman de Green Builder.
Después de la recesión de 2008, la conservación de energía se convirtió en una prioridad y ha permanecido allí desde entonces, señala Gutterman. Ahora es salud y bienestar, y ella espera que el tema siga siendo un enfoque clave en el futuro.
«No retrocedimos entonces, y tampoco volveremos esta vez»
El discurso en línea está tomando muchas formas. La gente habla sobre salud mental, alivio del estrés, telemedicina, tecnología inteligente, producción de energía en el lugar, seguridad alimentaria y resistencia. Las búsquedas de «citas relajantes» se han duplicado; Las búsquedas de “citas de estrés” se han triplicado. Pero el interés en la calidad del aire interior ha explotado.
“IAQ ahora es tan importante como la ubicación para algunos compradores de vivienda. Gutterman dice: “La calidad del aire interior ha cambiado rápidamente de ‘agradable a tener’ a una necesidad. Es la belleza de la pelota.
Afortunadamente, IAQ es algo en lo que los propietarios y compradores pueden hacer algo, incluso si no es fácil o económico. Pero si nos tomamos en serio la mejora de la calidad de nuestro aire interior, podemos hacerlo.
Eso es algo bueno, porque no cuidamos nuestras casas tan bien como deberíamos en medio de esta pandemia, dice Caroline Blazovsky, una experta en hogares saludables. Como CEO de My Healthy Home en Whitehouse Station, Nueva Jersey, ha investigado más de 30,000 casas en todo el país para personas con problemas de salud.
Lee También: Anciano con COVID-19 cuenta la vida de pesadilla