Harvey Weinstein, el ex magnate del cine cuyo supuesto patrón de abuso sexual impulsó el movimiento #MeToo en contra del abuso sexual, fue acusado de nuevo este lunes de agredir sexualmente a dos mujeres más, según la fiscal del distrito de Los Ángeles.
Estos nuevos cargos se presentan en la víspera de la selección del jurado en otro juicio penal contra Weinstein en Nueva York, donde también fue acusado de agresión sexual grave.
Weinstein está siendo acusado en Los Ángeles de violar a una mujer y agredir sexualmente a otra en dos incidentes distintos en dos días seguidos en febrero de 2013, dijo la oficina de la fiscal del distrito Jackie Lacey.
«Creemos que la evidencia mostrará que el acusado usó su poder e influencia para obtener acceso a sus víctimas y luego cometer crímenes violentos contra ellas», dijo Lacey, y agregó que los fiscales recomendaron que la fianza se fijara en 5 millones de dólares.
Si es declarado culpable, Weinstein enfrenta hasta 28 años en prisión estatal. Negó con vehemencia todas las acusaciones de actividad sexual sin consentimiento.
La oficina de Lacey ha estado revisando hasta nueve supuestos casos de agresión sexual contra el productor, como informó anteriormente NBC News. El grupo de trabajo de delitos sexuales en la industria del entretenimiento de la oficina de la fiscal está trabajando en estos casos.
La noticia de los nuevos cargos llegó pocas horas después de que Rose McGowan, Rosanna Arquette y otras mujeres que acusaron a Weinstein de conducta sexual se manifestaron cerca de un tribunal de Nueva York en el primer día de su juicio penal.
Weinstein, de 67 años, ingresó al juzgado encorvado sobre un caminador después de una cirugía de espalda. Cuando se le preguntó cómo se sentía, el exproductor visiblemente desaliñado sonrió débilmente.
Pero al otro lado de la calle, varias mujeres que han dicho que fueron acosadas o agredidas por Weinstein insistieron en que él no merecía nada de simpatía. Relataron su patrón de presunto abuso sexual en serie y denunciaron la cultura que dicen permitió ese abuso por demasiado tiempo.
«Se veía como un cobarde. No nos miraba. No hacía contacto visual», dijo Sarah Ann Masse, una escritora e intérprete que alegó en una entrevista exclusiva con la revista Variety que Weinstein la acosó sexualmente en ropa interior durante un entrevista de trabajo en 2008. «Este juicio es un momento de introspección, es la hora de la verdad para la sociedad, independientemente de su resultado legal».
Masse le pidió al jurado que «tome la decisión correcta y ponga a este hombre peligroso tras las rejas, donde pueda vivir el resto de sus días pagando por sus crímenes».
Weinstein enfrenta cargos por violar a una mujer en una habitación de hotel en Manhattan en 2013 y llevó a cabo un acto sexual forzado con otra mujer en 2006. La actividad en la sala del tribunal el lunes fue en gran parte protocolaria antes de que se suspendieran los procedimientos para el día, y se espera que comience la selección del jurado el martes.
Weinstein se declaró inocente en el caso.
En total, más de 80 mujeres lo han acusado de mala conducta sexual desde hace décadas, pero el juicio penal de Nueva York se centra en las denuncias de solo dos mujeres. Las acusaciones salieron a la luz por primera vez hace más de dos años en informes de investigación publicados por The New York Times y The New Yorker.
Gloria Allred, la poderosa abogada de derechos civiles que representa a las mujeres que acusaron a Weinstein en Los Ángeles y Nueva York, dijo en un comunicado que los «muros de la justicia lo están encerrando».
«La llegada del Sr. Weinstein a la justicia se ha retrasado y el sistema de justicia penal en Los Ángeles ahora lo está obligando a confrontar a quienes lo han acusado. Las mujeres ya no están dispuestas a sufrir en silencio y están dispuestas a testificar bajo juramento en un tribunal de justicia», dijo Allred.
«Esperamos un resultado justo y estoy segura de que el Sr. Weinstein recibirá la justicia que se merece», agregó.
En un acontecimiento notable el lunes, el juez en el caso dictaminó que la defensa de Weinstein no puede llamar como testigo al detective de la policía de Nueva York que supuestamente le dijo a una de las mujeres que acusa a Weinstein que eliminara archivos personales de su celular para ocultarlos de los fiscales, según la oficina del fiscal del distrito de Manhattan.
«Se acabó el tiempo»
Las mujeres que se reunieron el lunes cerca del juzgado pidieron un cambio cultural sistémico, el fin de la conducta sexual inapropiada en los lugares de trabajo en todo el país y lo que algunas describieron como el culpar a las víctimas por sus propios abusos.
«Se acabó el tiempo», dijo Arquette, refiriéndose al movimiento contra el acoso del mismo nombre. «Se le acabó el tiempo al acoso sexual en los lugares de trabajo. Se acabó el tiempo de culpar a los sobrevivientes. Se acabó el tiempo de disculpas vacías sin consecuencias, y se le acabó el tiempo a la cultura dominante del silencio que ha permitido que proliferen los abusadores como Weinstein».
Lauren Sivan, una reportera de televisión que afirma que Weinstein le mostró sus genitales y le ordenó que se quedara callada mientras él se masturbaba, desestimó las afirmaciones del equipo legal de él de que sus acusaciones no eran creíbles.
«Donde hay humo, generalmente hay fuego», dijo Sivan, flanqueada por otras mujeres que han hecho acusaciones y por una multitud de reporteros.
McGowan, la actriz y activista que acusó a Weinstein de violación, rindió homenaje a las mujeres que van a testificar en el juicio penal, y dijo que representan a muchas otras mujeres que quizá no tengan la oportunidad de hablar en la corte.
«Nos están representando y estoy inmensamente orgullosa de ellas», le dijo McGowan a los periodistas. «No tuvimos nuestro día para hablar. Pero con suerte ellas sii lo tendraan. Su victoria será nuestra victoria. Su pérdida será nuestra pérdida».
Cuando se le pidió que respondiera a una entrevista reciente en la que Weinstein dijo que sentía que sus supuestos esfuerzos para abogar por las mujeres en la industria del entretenimiento habían sido olvidados, McGowan lo llamó un «imbécil».
Este juicio, en el que hay tanto de por medio, podría decidir el destino de Weinstein. Si es declarado culpable de los cargos más graves, dos cargos de agresión sexual depredadora, podría ir a prisión de por vida.
Caitlin Dulany, una actriz que dijo que Weinstein la agredió sexualmente en un cuarto de hotel durante el Festival de Cine de Cannes de 1996, le dijo a NBC News en una entrevista telefónica el lunes por la mañana que guardaba la esperanza.
«La idea de que salga libre de esto es tan inimaginable para mí en este momento», dijo Dulany.
«Espero ver al sistema de justicia ponerse al día con la cultura moderna, y creo que este juicio puede esclarecer lo que necesita cambiar en nuestro sistema legal y mostrar las grietas, pero también brindar justicia a nosotros, sus sobrevivientes».