Una megaiglesia apostólica en un suburbio de Miami liderada por un pastor conocido por hablar en lenguas y realizar “milagros” en el escenario acogerá al presidente Donald Trump la próxima semana, cuando se espera que lance un esfuerzo extraordinario para rechazar exhortaciones en la comunidad cristiana para sacarlo del poder.
La campaña de Trump anunció el viernes —una semana después que una destacada revista cristiana pidió su salida del poder en un editorial— que el lanzamiento de la campaña Evangélicos por Trump del presidente será en la iglesia Ministerio Internacional El Rey Jesús.
Se considera que la iglesia, ubicada en West Kendall, es una de las mayores congregaciones hispanas en el país, que atrae regularmente a miles de fieles a sus dramáticos servicios. Dirigida en inglés y español por su fundador, Guillermo Maldonado —quien tiene el título de apóstol— es la principal de 10 recintos afiliados, desde Chicago hasta Homestead, y tiene su propia plataforma de streaming, una universidad y una piscina al aire libre para los bautismos colectivos de inmersión.
“El Rey Jesús era un lugar natural para lanzar nuestra coalición Evangélicos por Trump” dijo Kayleigh McEnany, secretaria de prensa nacional de Trump Victory, en un comunicado al Miami Herald. “El apóstol Maldonado es un firme partidario del presidente, lo que refleja el enorme apoyo que tiene el presidente Trump en la comunidad evangélica en general”.
La iglesia, conocida como El Rey Jesús, ha sido una escala popular para los candidatos políticos que cortejan al voto hispano. Rick Scott habló allí en 2010 el domingo antes de las elecciones durante la primaria republicana para la gobernación de la Florida, y candidatos legislativos al distrito 25 de la Florida se presentan en la iglesia durante la temporada de campaña.
“Es una congregación enorme, tiene miles de personas. Y se pueden conseguir muchos votos”, dijo Carlos Curbelo, ex legislador republicano quien representó la zona entre 2015 y 2019.
Demográficamente, la iglesia es una selección un tanto rara para un evento dirigido a los evangélicos, que son abrumadoramente blancos. Y aunque la política en Miami sigue dominada predominantemente por cubanoamericanos católicos y conservadores, la congregación que llena regularmente El Rey Jesús, con capacidad para 7,000 personas, es de toda América Latina.
Es común ver fieles ondear banderas de países latinoamericanos durante los servicios.
“El elector indeciso típico en Miami-Dade no es cubano”, dijo Curbelo. “Esto es una especie de dos por uno” para Trump.
Maldonado ha sido una figura controversial en la política y la religión en Miami.
En 2013, WPLG transmitió un segmento en que cuestionaba supuestos milagros de Maldonado, como una mujer a quien le revivió su hija después de una hora en la morgue, y otra mujer a quien la esclerosis múltiple que supuestamente padecía se le quitó en el escenario de la iglesia. En algunas actividades, Maldonado describe la apertura de un “portal” desde el cual el espíritu santo sana a los fieles.
La iglesia de Maldonado ha experimentado un gran aumento de popularidad desde que la fundó a mediados de los años 90 con una docena de fieles después que el pastor afirmó que Dios lo había visitado.
“Dios me llamó hace unos 20 años en una visita”, declaró Maldonado a Publishers Weekly en una entrevista en 2013. “Mientras yo rezaba, la presencia de Dios llenó mi habitación. Su presencia cayó sobre mí y comencé a llorar. Escuché que me decía: ‘Te he llamado para llevar mi poder sobrenatural a esta generación’. Estuve dos horas en el suelo, y entonces escuché otra vez la voz, pero esta vez dentro de mí, diciéndome lo mismo”
Los servicios en la iglesia se centran alrededor de los largos sermones de Maldonado, durante los cuales una banda toca mientras él establece contacto con la multitud, cambiando de inglés a español, y viceversa. Algunas veces, Maldonado llama a un fiel y lo empuja con una fuerza invisible.
No fue posible contactar a Maldonado directamente y a través de su hijo, Bryan, quien también predica en la iglesia. La iglesia, un edificio púrpura y beige al otro lado del Aeropuerto Tamiami, estaba cerrado cuando un reportero visitó el lugar el viernes.
Maldonado, quien muchas veces rechaza ser entrevistado por la prensa, dijo al Miami Herald en 2006 que “Dios le dijo directamente” que su congregación crecería al 10% de la población de Miami. Aunque no ha llegado hasta ahí, ha desarrollado su propia línea de libros, una red de televisión y streaming, y ha evangelizado en decenas de países a nombre de la Coalición Internacional de Apóstoles, un grupo de líderes cristianos dedicados a un renacimiento mundial del cristianismo.
Maldonado también ha dicho que cree que la iglesia debe participar más en la política, y practica lo que dice.
Maldonado apoyó al nominado presidencial republicano John McCain en 2008 e hizo campaña ese mismo año a favor de una fallida propuesta electoral que trató de cementar en la Constitución estatal la entonces existente prohibición al matrimonio entre personas del mismo sexo. También ha hecho la invocación ante la Cámara de Representantes federal, visitó la Casa Blanca en 2017 para ver a Trump firmar una orden ejecutiva sobre la libre expresión y la libertad religiosa, y fue uno de los ministros que oró junto a Trump en la Casa Blanca en octubre.
“¡Qué privilegio fue estar en la Casa Blanca este fin de semana para rezar por nuestro presidente y por nuestra hermosa nación!”, escribió Maldonado en Instagram junto con una foto que en que se le veía con una mano sobre el hombro izquierdo del presidente.
La campaña de Trump anunció la semana pasada planes para celebrar un evento para los evangélicos después que la revista Christianity Today publicó un duro editorial en calificaba de “profundamente inmoral” la campaña de Trump para convencer al gobierno de Ucrania que investigara a la familia del ex vicepresidente Joe Biden. La revista respaldó las acusaciones aprobadas la semana pasada por los demócratas en la Cámara federal y pidió al Senado federal que sacar a Trump del poder.
Desde entonces, decenas de figuras prominentes en la derecha religiosa han respaldado a Trump y criticado a Christianity Today, entre ellos el hijo del ahora desaparecido reverendo Billy Graham, quien fundó la revista. Y en Nochebuena, Trump no asistió a la Iglesia Episcopal Bethesda-by-the-Sea —donde el presidente y la primera dama Melania Trump se casaron en 2005, y donde su hijo Barron fue bautizado— y se presentó con la primera dama en la iglesia Family Church-Downtown en West Palm Beach, una congregación bautista más conservadora.
Bethesda-by-the-Sea ha defendido en ocasiones causas progresistas y ha criticado algunas de las políticas de la administración de Trump.
Fuente: El Nuevo Herald