Se le considera una especie invasora, también se ve involucrado el tegu blanco y negro argentino
El senador estatal Gary Farmer presentó un proyecto de ley en el que se prohíbe la venta y posesión de las iguanas verdes, con la intención de librar al estado de la Florida de estos animales que se consideran invasivos.
Esto restringe la posesión o el comercio de varios reptiles al agregar además de la iguana verde, al tegu blanco y negro argentino. Ambas especies no son nativas de Florida.
La Comisión de Convervación de Pesca y Vida Silvestre (FWC, por sus siglas en inglés) etiquetó a la iguana verde como una especie invasora, ya que se han vuelto muy frecuentes en el sur de Florida, aun cuando sus orígenes están en Sur y Centroamérica.
«Las iguanas verdes causan daños a la vegetación del paisaje residencial y comercial y, a menudo, los propietarios las consideran una molestia», dice la FWC. También pueden propagar salmonella.
La población de iguanas verdes ha crecido tanto que la FWC permite que los floridanos puedan matar a estos animales durante todo el año. También se alienta a los propietarios a retirar a dichas especies de sus propiedades y buscar servicios de eutanasia en un veterinario o en una sociedad humanitaria.
La población de tegu blanco y negro argentino aún no ha alcanzado los niveles de la iguana verde. Pero según la ley de Farmer, recibirían el mismo trato.
Los lagartos se reproducen en los condados de Hillsborough y Miami-Dade y pueden ser una amenaza para otras especies.
«Los posibles impactos del tegus incluyen la competencia y la caza de la vida silvestre nativa de Florida, incluidas algunas especies en peligro de extinción y protegidas», también menciona la FWC. «Los tegus se alimentan de los nidos de otros animales, y los investigadores han documentado que estos comen huevos de cocodrilo americano y perturba los nidos de cocodrilos estadounidenses en Florida».
Si se aprueba la ley del también agricultor, las iguanas y tegus se agregarían a una lista de reptiles prohibidos que incluye la pitón birmana, la anaconda verde y otras cinco especies.
La medida entraría en vigencia el 1 de julio de 2020. Aquellos que ya obtengan un permiso antes de esa fecha para mantener a los animales pueden hacerlo hasta que el animal muera.
Fuente: miamidiario.com