La mitad de las personas que necesitan este medicamento para sobrevivir no pueden costearlo, indicó la agencia durante el anuncio enmarcado en el Día Mundial de la Diabetes. Prometió que agilizará el proceso de aprobación de versiones genéricas, una medida que favorecerá a muchos países, aunque difícilmente tendrá un impacto directo en EEUU.
La Organización Mundial de la Salud comenzará a probar y aprobar versiones genéricas de la insulina para ampliar el acceso e intentar reducir los precios del medicamento contra la diabetes.
La decisión, anunciada en el marco del Día Mundial de la Diabetes (14 de noviembre), forma parte de una serie de medidas encaminadas a hacer frente a la creciente carga de la enfermedad que afecta a 400 millones de personas y es la séptima causa de muerte en el mundo.
A partir del año entrante, la insulina formará parte del Programa de Precalificación de Medicamentos de la OMS que acelera el proceso de aprobación y aumenta el acceso a productos médicos esenciales de calidad.
Esto permitirá que agencias de la ONU y organizaciones como Médicos sin Fronteras puedan obtener versiones genéricas aprobadas de la insulina y que gobiernos de país en desarrollo puedan tener garantías de que estas drogas aprobadas son de calidad. Así ocurrió con los antivirales contra el VIH que en 2002 se incorporaron al programa de precalificación y hoy en día están disponibles en versiones genéricas menos costosas y certificadas por la OMS.
Más competencia para bajar los precios
Hasta ahora, el mercado de la insulina está dominado por tres farmacéuticas -Eli Lilly, Novo Nordisk y Sanofi- que han ido aumentando progresivamente el precio. En EEUU, por ejemplo, el precio de un vial ha pasado de 35 dólares a 275 dólares en dos décadas, según el New York Times.
“La cantidad de insulina disponible en el mundo es demasiado baja y el precio muy alto, así que realmente necesitamos hacer algo”, dijo Emer Cooke, directora del departamento de Regulación de Medicinas y otras Tecnologías de Salud de la OMS.
En los últimos 35 años, la cantidad de personas con diabetes se ha cuadruplicado no sólo por el aumento de la población y de la expectativa de vida, sino sobre todo por la epidemia de obesidad que es un factor que contribuye al desarrollo de la diabetes tipo 2.
La insulina es una hormona que el organismo genera naturalmente para controlar el azúcar y convertir la glucosa en energía. Su descubridor, Frederick Banting, vendió la patente por apenas 1 dólar en 1921 para garantizar el acceso a ella.
Los diabéticos tipo 1 y los que sufren de diabetes tipo 2 pero son insulino-dependientes deben tomarla para mantener regulados los niveles de azúcar en la sangre.
Según estimaciones de la OMS, 65 millones de personas con diabetes tipo 2 en el mundo necesitan tratarse con inyecciones de insulina; mientras que todas las personas diagnosticadas con la diabetes tipo 1 -unos 60 millones- la necesitan para sobrevivir.
No obstante, la mitad no puede obtenerla porque el sistema de salud de sus países no puede costearla, indicó la OMS.
“ Demasiadas personas que necesitan insulina se enfrentan a dificultades económicas para acceder a ella, o se quedan sin ella y arriesgan sus vidas. La iniciativa de la OMS de precalificación de la insulina es un paso fundamental para asegurar que todos los que necesitan este producto vital puedan acceder a él”, declaró el Director General de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus.
Según data recabada en 24 países de cuatro continentes entre 2016-2019 por el ente multilateral, 40% de los hospitales no tiene insulina disponible y el precio en farmacias privadas llega hasta el 20% del salario de un trabajador promedio.
Un buen primer paso»
En EEUU, muchos pacientes se ven en la necesidad de racionarla o comprarla en el mercado negro. En referencia a ello, Cooke indicó que l a medida podría facilitar la entrada de genéricos en el mercado estadounidense al aumentar la confianza de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA por sus siglas en inglés) en esos productos aprobados por la OMS.
Pero, tal y como apunta un artículo del New York Times, es poco probable que la medida de la OMS tenga un impacto inmediato en EEUU donde tan sólo aplicar a la aprobación del ente regulatorio -la FDA- es casi prohibitivo para pequeñas empresas.
El director de la Campaña Insulina Costeable Ahora, Rosemary Enobakhare, dijo ese medio que el anuncio de la OMS era “un buen primer paso hacia insulina asequible para todos en el mundo”, pero que no ayudará a los 30 millones de personas con diabetes en Estados Unidos.
Fuente: Univision