Internet cumplió 50 años: así fue el primer inicio de sesión

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El 29 de octubre de 1969, hace hoy cincuenta años, nació internet. Fue un comienzo humilde: el primer acceso remoto de un terminal de la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA) en otro terminal del Instituto de Investigación de Stanford (SRI) en la Bahía de San Francisco. Pero fue un pequeño paso que con el tiempo catapultaría al mundo a la era de la información.

Lo mejor de todo es que existe una hoja de papel que documenta ese momento importante para internet, primero llamado Arpanet porque era un proyecto financiado por ARPA. Hoy probablemente conozcas a la antigua ARPA por el nombre DARPA, la agencia gubernamental que está trabajando en tecnología como animales modificados genéticamente y gafas de visión sobrehumana.

Los operadores de terminales que trabajaban en la UCLA en 1969 mantuvieron un registro detallado de todo lo que pasaba mientras configuraban su red. Y en una entrada del “29 Oct 69” podemos ver una anotación particularmente importante a las 22:30: “Hablamos con el SRI, Servidor a Servidor”.

Esa hoja de papel, que actualmente se encuentra en los archivos de la UCLA, es prácticamente el certificado de nacimiento de internet, un registro escrito del momento en que los servidores de la UCLA y el SRI comenzaron a comunicarse.

© Imagen: UCLA Special Collections

Charlé sobre este texto con Bradley Fidler, historiador de la informática para el Instituto de Tecnología Stevens de Nueva Jersey. El Dr. Fidler me contó por qué el documento es importante y cómo encaja en el gran esquema de la historia de las redes.

Gizmodo: ¿Qué hace que este documento sea tan especial?

Dr. Fidler: Si le dices a la gente qué es en realidad, no pensarán que es especial. Documenta con precisión el primer inicio de sesión remoto (no mensaje) entre dos computadoras (habían probado la línea con terminales de antemano) en el primer despliegue (no el primero en ser diseñado; eso fue mínimo un empate con el Reino Unido) de una red de computadoras de uso general (no la primera red de computadoras; hubo varias en aquel momento, y poco después) que fue en gran parte (no del todo) conmutada por paquetes. El software de red que les daba a las máquinas diferentes una forma de hablar entre ellas a través de los conmutadores de paquetes no estaba terminado, por lo que no estaban usando una red completa de ninguna manera.

Pero el documento es especial porque documenta la primera prueba exitosa del propósito principal de Arpanet: acceso remoto por cualquier motivo (por ejemplo, el usuario podría ejecutar cualquier aplicación) entre diferentes tipos de computadoras, utilizando una tecnología experimental llamada conmutación de paquetes, que permitía formas de redes más distribuidas. Esto es importante porque pone en marcha una pequeña parte de la historia global de las redes, una que creció y extinguió muchos caminos alternativos. Puso en marcha tradiciones, diseños, instituciones que no fueron reemplazadas sino que se transformaron en lo que vivimos hoy. Así como detalles técnicos como la forma en que internet usa nombres, direcciones y aplicaciones, y los detalles institucionales, como la forma en que se administra internet. Luego, los investigadores financiados por DARPA probaron tecnologías de interconexión de redes a través de Arpanet, y una década después de la primera conexión, en 1979, Arpanet fue la primera y única red troncal de internet, un papel que mantuvo hasta 1986. Aunque se supone que la estructura subyacente de internet es invisible, su diseño establece las condiciones y los límites de cómo podemos conectarnos, cómo podemos ser monitorizados, cómo puede asegurarse, etc.

Gizmodo: ¿Cómo descubriste este documento?

Dr. Fidler: Yo era un estudiante de doctorado en historia de la UCLA y estaba retrasando unas correcciones de exámenes de civilización occidental, creo, mientras charlaba con Len Kleinrock sobre la historia de internet. Kleinrock sacó este documento de su archivador para mostármelo. Como historiador entrenado, pensé: genial, esto mola. Más tarde, le sugerí que me dejara archivarlo en las Colecciones Especiales de la UCLA junto con otros materiales de ese periodo.