Encontraron cuerpo de venezolano desaparecido en la frontera de EE.UU

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El joven venezolano Ronald Aldair Lambert León que había desaparecido en la frontera sur de Estados Unidos tratando de cruzar para pedir asilo fue hallado muerto en aguas del Río Grande, cerca de una ciudad de Texas, y su familia lanzó una campaña de recaudación para repatriar el cuerpo.

“Se ahogó, estaba flotando en el río, lo encontraron del lado de Estados Unidos. Lo hallaron el 25 de julio, dos días después de que intentó cruzar”, dijo este martes Andrés Lambert León, hermano de Ronald, en una entrevista con el Nuevo Herald.

La familia del joven de 25 años se enteró de lo sucedido el lunes en la noche. La última vez que Ronald se comunicó con sus familiares fue el 23 de julio y les dijo que intentaría cruzar por segunda vez el río desde la ciudad mexicana Reynosa, fronteriza con EEUU.

Su hermano dijo que se enteraron de que había muerto porque un allegado a la familia que reside en Atlanta empezó a llamar a las oficinas forenses de la zona hasta que le informaron que la Patrulla Fronteriza descubrió el cuerpo del hombre no identificado flotando a lo largo de la orilla del Río Grande, cerca del Refugio de Vida Silvestre Santa Ana en Alamo, Texas.

“Son las características de mi hermano, la cicatriz en la boca y en el abdomen. La ropa que tenía puesta es la de él. De hecho, las medias que tenía puestas son mías, los tenis son de él. La franela roja siempre la usaba, hay una foto en México donde se ve con ella”, detalló Andrés.

En un informe de NamUs al que tuvo acceso el Nuevo Herald, una base de datos sobre casos de personas desaparecidas no identificadas en Estados Unidos, se indica que se halló el cuerpo descompuesto e irreconocible de un hombre hispano, de entre 20 a 30 años, el 25 de julio, cerca del Refugio de Vida Silvestre Santa Ana en Alamo.

El reporte incluye otros datos como las cicatrices en el cuerpo, el color del cabello, la contextura, el peso y el color de los ojos, además de las fotos de la ropa y de los zapatos.

“El cuerpo está irreconocible por el tiempo que tiene pero el alguacil del condado Hidalgo, Texas, está haciendo averiguaciones para confirmar la identidad y nos pidió documentos. Le mandamos la cédula de identidad de Ronald. Están tratando de identificarlo con las huellas dactilares y quieren hacer una prueba de ADN a mi mamá, pero si las huellas coinciden eso no será necesario”, dijo el hermano de la víctima.

La familia está solicitando ayuda para repatriar el cuerpo una vez que sea identificado y publicó en Facebook una campaña con ese objetivo.

“Luego de más de 60 días de búsqueda encuentran a Ronald sin vida en una ciudad de Texas, EEUU, sumado al terrible dolor, su familia atraviesa el peor momento de sus vidas sin recursos económicos para tramitar algunos gastos que son necesarios para lograr que Ronald tenga el descanso que se merece. Sus hermanos en Chile viven el problema de cada venezolano que salió del país buscando una mejor vida y Ronald murió persiguiendo este anhelado sueño”, se indica en Facebook.

Ronald, nacido en Maracaibo, Venezuela, había emigrado primero a Bogotá, Colombia, por su activismo político y la grave situación económica y social de Venezuela. Allí estuvo poco tiempo y se trasladó a México con la intención de cruzar la frontera con Estados Unidos.

Llegó a Reynosa donde se encontró con un grupo de siete cubanos para cruzar la frontera mediante el río. Su primer intento fue el 22 de julio y la policía mexicana lo detuvo junto con dos de las cubanas del grupo, pero los liberaron con la advertencia de que no volvieran a intentarlo.

Pero Ronald y todos los cubanos decidieron intentarlo al día siguiente con una “persona que los iba a pasar de un lado a otro del río (un coyote)“, dijo el hermano.

Ese día, el 23 de julio, había mucha presencia policial mexicana cerca del río y el coyote fue detenido al tiempo que le incautaron la balsa que utilizaría para trasladar al grupo integrado por 5 mujeres y dos hombres cubanos, además del joven venezolano.

El venezolano y los cubanos se escondieron en unos arbustos cuando detuvieron al coyote “a ver si alguien de la misma gente iba a buscarlos”.

Arleth Calzadilla, una de las cubanas del grupo que la familia contactó a través de las redes sociales de Ronald, dijo que el joven se desesperó porque pensó que a él lo detendrían de nuevo y se lanzó al río, de noche.

El joven antes de tomar esa decisión se había registrado en una lista informal de los inmigrantes que llegan a Reynosa para pedir asilo en la frontera sur de EEUU y le dieron el número 1,039.

Cuando Ronald se sumergió en el río, Calzadilla dijo que eso sucedió entre las 9 y las 11 de la noche.

Calzadilla contó a la familia de Ronald que vio su silueta a través de los arbustos, pero como era de noche no logró visualizar si él logró cruzar. Solo que se encontraba en medio del río.

Fuente El Nuevo Herald