Tras no obtener los permisos correspondientes y legales, los jefes a cargo de las autoridades respectivas se vieron en la obligación de apartar momentáneamente de sus funciones al implicado mientras se realizan las investigaciones para determinar realmente lo que pudo haber sucedido en dicho instituto.
La semana pasada ocurrió un hecho ilógico en Florida, cuando un oficial de la policía de Orlando, identificado bajo el nombre de Dennis Turner, arrestó a dos niños, de seis y ocho años respectivamente, pertenecientes a la Academia Lucious y Emma Nixon, una escuela chárter ubicada en la misma localidad. Pero tras incumplir con el reglamento interno correspondiente a los arrestos de menores de 12 años, el agente fue suspendido, según anunció el jefe del Departamento, Orlando Rolón.
En el caso de la niña que tenía la edad más baja, todo ocurrió cuando armó un «berrinche» debido a que Turner agarró una de sus muñecas, provocando así una reacción adversa que su familia, específicamente su abuela, atribuyó a que esta sufre de apnea del sueño. Pese a esta advertencia, el agente policial que estaba deteniéndola no le hizo caso y de igual forma la metió en la patrulla con esposas puestas.
Es por ello que la policía se encuentra haciendo una investigación interna sobre lo sucedido, razón por la cual Turner no puede ejercer su profesión mientras la misma esté en curso. «El Departamento de Policía de Orlando tiene una política que aborda el arresto de un menor y nuestro hallazgo inicial muestra que la política no fue seguida. Como abuelo de tres niños menores de 11 años, esto me preocupa mucho».
La niña fue trasladada incluso el jueves a un centro de detención juvenil, donde sería procesada, sin embargo al enterarse de lo sucedido uno de los supervisores la devolvió a la escuela antes de iniciar dicho acto. Caso distinto al joven de 8 años de edad, quien fue arrestado igualmente, pero en otro caso aislado y cumplió con los procedimientos legales y posteriormente fue entregado a sus familiares.
Fuente: miamidiario.com