Llegar a Wabi Sabi fue como sentirse en casa. No sé si por llegar en el momento en el que el restaurante cierra y ver reunido al staff en la mesa tomando el lunch, el haber degustado el plato que compartían o fue quizá la calidez con la que me recibieron.
Sea cual sea el motivo, este lugar es inspiración; sus paredes imperfectas están vestidas de arte, una de ellas cubierta con muchísimos origamis de variados colores. Como bien nos explica uno de sus dueños, Alvaro Perez, Wabi Sabi es la filosofia de encontrar belleza en la imperfección.
Shuji Hiyakawa es el chef encargado de llevar la verdadera autenticidad de la cocina japonesa en este lugar. Su sueño es ser líder en la cocina japonesa de Miami, ciudad a la que llegó hace 5 años con un concepto muy claro de lo que quería realizar. Pero fue hasta hace un par de años que se asoció con Pérez encontrando en éste, el engranaje perfecto de culturas y metas para comenzar a hacer su sueño realidad.
Hiyakawa apuesta por plasmar toda la cultura con la que creció para que sus comensales sientan el gusto de la buena mesa japonesa, en un movimiento culinario de calidad inigualable que piensa transferir por medio de sus platos. “La comida debe hablar por sí misma… quiero que mis platos sean la suma de toda mi experiencia” por ello este próximo 6 de diciembre abrirá en Wynwood su segundo restaurante “Hiyakawa” para el que ha creado un menú simple con ocho platos calientes y omakase (ponerse en las manos del chef)
Shuji quien siempre se mostró muy simpático y agradado con nuestra conversación, expresó su mejor sonrisa cuando le preguntamos acerca del tan conocido mito de que los chefs tienen mal carácter… el nos dice que eso es quizá cosa del pasado, que la madurez ha erradicado y que su Staff es para el como sus “ñinos” al que enseñarles que lo más conveniente e importante es transferirle sus conocimientos y cultura de buen servicio.
Fuente: Andreina Caro/MiamiNews24