Purdue solicita la bancarrota para hacer frente a las indemnizaciones

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La compañía, fabricante del analgésico OxyContin, llegó a un principio de acuerdo para pagar hasta 12.000 millones de dólares

Purdue Pharma, considerada una de los principales responsables de la crisis de los opiáceos en Estados Unidos, ha solicitado la declaración de bancarrota, cediendo a la presión de las más de 2.600 demandas pendientes. El consejo de la farmacéutica se reunió este domingo para tomar una medida ya esperada, que permite que la empresa, que llegó a un principio de acuerdo para pagar hasta 12.000 millones de dólares en indemnizaciones, pueda reestructurarse e intentar salir de la crisis.

La compañía, fabricante del analgésico OxyContin, solicitó la medida este domingo en un tribunal federal de bancarrotas en White Plains (Nueva York). Purdue llegó a un pacto parcial con 24 estados y abogados que representan a más de 2.000 ciudades, condados y otros demandantes. Sin embargo, algunos de los estados más importantes, como Nueva York, Massachusetts y Connecticut, se han opuesto, y piden más garantías de la familia propietaria, los Sackler. Los demandantes acusan a las grandes farmacéuticas de utilizar técnicas agresivas de marketing que minimizaban los riesgos de adicción y sobredosis de los analgésicos.

El OxyContin empezó a venderse en Estados Unidos hace dos décadas. Pronto se convirtió en uno de los analgésicos más populares, ya que su potencia excedía la de cualquier rival. Purdue no cotiza, por lo que no está obligada a publicar las cifras de su negocio. Se estima que el tratamiento contra el dolor le generó más de 35.000 millones en ventas. Eso convirtió a su propietaria, la familia Sackler, en una de las más ricas del país.

Estados Unidos afronta una crisis de salud pública mayor, que se calcula que ha causado unas 400.000 muertes entre 1999 y 2017. Cerca de 40 estados presentaron demandas contra la farmacéutica y otras compañías, en una coalición con la que buscaban una compensación por todos los costes que han tenido que soportar por las adicciones y las pérdidas ocasionadas. El dinero que se recaude se destinará a programas de prevención y de tratamiento de los afectados.

Fuente: elpais.com