Florida es el cuarto estado de Estados Unidos donde más aumentó el número de personas sin seguro médico en 2018, solo superado por Texas, Oklahoma y Georgia, de acuerdo con el informe anual de la Oficina del Censo divulgado este martes.
El documento subraya que por primera vez en los últimos 10 años se incrementó en el país la cantidad de estadounidenses sin cobertura de salud en aproximadamente dos millones de personas, reportó CiberCuba.
El 8.5% de la población quedó sin resguardo sanitario durante todo 2018, en comparación con el 7.9% en 2017.
El estudio reveló que muchos de los que perdieron esta protección no eran ciudadanos, realidad que apunta a la política de inmigración del gobierno de Donald Trump. Alrededor de 574.000 no ciudadanos dejaron de recibir este beneficio en 2018, lo que representa una caída del 2.3%.
“Los no ciudadanos no asegurados representan casi un tercio del aumento de los no asegurados, lo que puede reflejar la postura más agresiva de la administración en materia de inmigración”, señaló Joseph Antos, economista de salud del American Enterprise Institute.
Los funcionarios precisaron que la mayor parte de la caída en la cobertura estaba relacionada con una disminución del 0.7% en los participantes de Medicaid, mientras que la cifra de personas con seguro privado se mantuvo estable y la de los que tienen Medicare aumentó.
El número de personas sin seguro se asocia con la pobreza y con si el estado expandió su programa de Medicaid bajo la política del Obamacare. En ese sentido, ninguno de los que muestran las tasas más altas: Texas, con el 17.7%; Oklahoma, con el 14.2%; Georgia, con el 13.7% y Florida, con el 13%, lo hicieron.
La cantidad de menores de 19 años no asegurados aumentó en 0.6 puntos porcentuales de 2017 a 2018, a 5.5%.
Florida tiene una población de 21.3 millones de habitantes, según los datos actualizados del Censo.
Según Joan Alker, directora ejecutiva del Centro para Niños y Familias de la Universidad de Georgetown, esa “grave erosión de la cobertura de salud de los niños” se debe fundamentalmente a la política de la administración Trump, cuyas acciones “han dificultado el acceso a la atención médica y han disuadido a las familias de inscribir a sus hijos”.
“Estos niños no obtienen cobertura privada como lo sugirió la Administración Trump, sino que no tienen seguro”, dijo en un comunicado.
“Los datos del censo son claros: la tasa de personas sin seguro aumenta considerablemente y se debe a una pérdida de cobertura pública, principalmente Medicaid”, añadió.
Los expertos explicaron que las tasas de población sin seguro generalmente caen cuando las de desempleo también lo hacen; sin embargo, esa tendencia no se cumplió ahora, pues la tasa de desempleo en Estados Unidos bajó levemente de 4.3% en 2017 a 4% en 2018.