En julio de 2019, la selección femenina estadounidense ganó el Mundial de Fútbol. Una de las claves de su éxito: monitorear el ciclo menstrual de cada una de las jugadoras y adaptar los entrenamientos y dietas en función a eso.
Ese es un enfoque que muchas creen que está pendiente desde hace tiempo.
En los últimos años, algunas de las mejores deportistas del mundo han hablado sobre el impacto de su ciclo menstrual en sus entrenamientos y en su rendimiento.
La tenista británica Heather Watson atribuyó su pérdida en la primera ronda del Abierto de Australia 2015 a síntomas menstruales, como mareos y náuseas, y la también británica atleta olímpica Eilish McColgan cree que su periodo contribuyó a una lesión en sus músculos isquiotibiales el año pasado.
Una investigación de 2016 mostró que más de la mitad de las atletas de élite femeninas dicen que las fluctuaciones hormonales durante su ciclo menstrual obstaculizaron su trabajo y su estado físico.
Sin embargo, muchas deportistas, de élite o aficionadas, son reacias a hablar de sus períodos con sus entrenadores y equipos por vergüenza.
Ahora existen aplicaciones para eso.
FitBit lanzó su sistema de «monitoreo de salud femenina» el año pasado, que les permite a sus usuarias controlar sus períodos y registrar sus síntomas.
«Teniendo toda la información sobre tu salud y tu estado físico en un mismo lugar. Observando las tendencias de tu ciclo y los datos a lo largo del tiempo puedes comprender mejor las conexiones entre tu actividad, sueño y síntomas menstruales», le dice a la BBC Jennifer Mellor, directora de ingeniería en Fitbit.
«En lo que respecta a entrenar, cada cuerpo es diferente«.
Los niveles de energía pueden variar en diferentes puntos del ciclo de una mujer o sentirse intensos durante todo el mes. Al usar el dispositivo de monitoreo de salud femenina, las usuarias pueden ver señales claras y personalizadas de cuando se ralentiza o se intensifica».
La app de salud femenina Clue también permite a sus usuarias controlar los niveles de ejercicio y energía a través de su ciclo.
«Al introducir datos de manera constante en la aplicación, pueden obtener un mejor entendimiento de cómo su entrenamiento puede variar en diferentes puntos y ajustarlo», dice Ida Tin, cofundadora de Clue.
«Por ejemplo, podrían descubrir que algunos días son mejores para entrenamientos fuertes, pues los niveles de energía son más altos, mientras que en otros la energía es más baja de que costumbre, por lo que los estiramientos y los ejercicios suaves pueden ser mejores opciones».
Hay otra app que va un paso más allá al usar las percepciones de atletas de élite y compartirlas.
Se llama FitrWoman y pertenece a la compañía de tecnología para el deporte Orreco. Fue fundada por la corredora de élite e investigadora Georgie Bruinvels y por la directora de desarrollo Grainne Conefrey.
La aplicación permite a las usuarias monitorear sus períodos, reportar los síntomas, registrar entrenamientos y recibir apoyo sobre nutrición y fisiología en cada fase de su ciclo.
La app es usada por varias deportistas de alto nivel y la doctora Bruinvels ha trabajado con algunos equipos femeninos de élite, como la selección de fútbol y el equipo de natación estadounidenses y varias atletas de Red Bull.
Las usuarias introducen los detalles de su último ciclo y su duración, permitiendo a la aplicación proporcionar entrenamientos personalizados y sugerencias nutricionales, además de explicar los cambios en su cuerpo.
Una «barrera» para el deporte
«El ciclo menstrual se ha visto durante mucho tiempo como una barrera para el entrenamiento y el rendimiento«, le dice a la BBC el doctor Richard Burden, director técnico de fisiología en el Instituto Inglés del Deporte (EIS, por sus siglas en inglés), que actualmente gestiona la campaña SmartHER para promocionar la concientización sobre la salud de las mujeres en el deporte.
«Pero si lo miras de otra forma, hay un verdadero potencial de usar las fluctuaciones hormonales para ser más específicos y precisos sobre los entrenamientos que puedes hacer en lugar de, simplemente, dejar de entrenar».
Esas fluctuaciones pueden afectar a una gran cantidad de funciones fisiológicas y psicológicas, desde cómo una mujer se mueve y adapta al entrenamiento a cómo piensa y se siente.
Así que comprender cuándo ocurrirán esas fases en cada mujer permite a los entrenadores optimizar los ejercicios.
Jamie Main, entrenador titular en el Escuadrón de Natación Derventio Excel Performance, en Derbyshire (Inglaterra), comenzó a usar la app de Orreco hace seis meses. Eso le permite compartir los perfiles de las atletas (con su permiso) para monitorear su estado en tiempo real y planificar.
«Desde un principio, normalizó las conversaciones que tengo con las atletas», le cuenta a la BBC. «Rompió el falso tabú sobre el tema».
«Podemos ser proactivos a la hora de adaptar sesiones de alta intensidad que no coinciden con el ciclo. También hay puntos en un ciclo donde hay mayores posibilidades de lesionarse. Tener esto más presente nos permite incorporar más trabajos de recuperación y calentamientos progresivos».
Por otra parte, la app le muestra a Main en qué momentos puede aumentar la intensidad del entrenamiento con otro tipo de sesiones más duras «espalda contra espalda», un enfoque que tiene respaldo científico.
La nadadora británica Mia Slevin (medallista europea junior y cuatro veces campeona con Reino Unido) dice que la app le explica qué alimentos es importante ingerir a ciertas horas, lo cual no sabría si no monitoreara su ciclo.
Por ejemplo, hay veces en que los niveles de azúcar en sangre pueden ser más inestables y aplicaciones como FitrWoman te aconsejan que tomes proteínas y que elijas snacks con carbohidratos complejos.
La corredora británica de media y larga distancia Emelia Górecka dice que la app le ha ayudado a registrar sus síntomas, incluido el sangrado menstrual abundante, y adaptarse a su régimen de entrenamiento.
«Después de meses, comencé a percibir patrones y pude relacionar mis síntomas con diferentes aspectos del entrenamiento. La app me da consejos e información sobre las fases de mi ciclo», le cuenta a la BBC.
«Por ejemplo, la interrupción del sueño en la fase cuarta de mi ciclo es muy prominente en mi caso, por lo que eso es algo de lo que trato de estar al tanto, sobre todo en bloques de entrenamiento especialmente duros y en las carreras», agrega.
«Eso incluye comer alimentos ricos en melatonina antes de irme a dormir, como bananas».
Aunque se necesitan más investigaciones y datos, el impacto de esta tecnología en las mujeres que hacen ejercicio y compiten a cualquier nivel puede ser notable y podría resultar transformador para las profesionales.
«La tecnología va a jugar un rol muy importante a la hora de permitirnos ajustar el entrenamiento de cada mujer y encontrar el 0,5-1% de diferencia en el rendimiento que puede ser clave a la hora de ganar o no una medalla de oro», dice Burden.
Fuente: bbc.com