La Corte Suprema de Justicia de EE.UU autorizó en un fallo dividido a que el presidente Donald Trump emplee 2.500 millones de dólares del presupuesto de defensa para construir un muro de unos 160 kilómetros de extensión en la frontera con México.
«La solicitud de suspensión presentada a la magistrada [Elena] Kagan y referida por ella a la Corte es otorgada. Entre las razones se cita que el Gobierno ha mostrado de manera suficiente en esta etapa que los demandantes carecen de motivación para lograr que se revise» una decisión previa del Departamento de Defensa para liberar los fondos, dice el dictamen del alto tribunal.
La decisión provisional, adoptada por cinco votos contra cuatro, permite al presidente emplear los fondos para construir un muro fronterizo de unos 160 kilómetros de extensión en los estados de California (oeste), Arizona y Nuevo México (sur), según el diario Los Angeles Times.
De esta forma la Corte Suprema deja en suspenso una prohibición que había sido ordenada por un juez federal de Oakland y por la Corte de Apelaciones del Noveno Circuito de San Francisco, hasta que la demanda termine de dilucidarse en ese tribunal de alzada.
Si el Gobierno no obtiene un fallo positivo en la Corte de Apelaciones podría presentar un recurso de amparo que, eventualmente, el máximo tribunal podría aceptar y tendría la última palabra.
El Gobierno recurrió a la Corte Suprema para que levantara provisionalmente la prohibición debido a que el 30 de septiembre expira el plazo para gastar los 2.500 millones de dólares del Pentágono antes de que concluya el año fiscal.
La prohibición impuesta por el juez y la Corte de Apelaciones obedeció al argumento de que el Gobierno estaba intentando eludir al Congreso, que previamente había rechazado asignar esos recursos para el muro.
«Es la Constitución la que asigna al Congreso la competencia presupuestal», dijo la Corte de Apelaciones al determinar la prohibición del gasto.
El caso fue iniciado por una demanda de la organización ambientalista Sierra Club, la Coalición de Comunidades de la Frontera Sur y la Unión Estadounidense por las Libertades Civiles (ACLU), según Los Angeles Times.
El litigio alega que el muro previsto, de más de nueve metros, dañaría la vida silvestre y el ambiente de zonas remotas.
Fuente: Sputnik