Cientos de corales de diversas especies de los Cayos de Florida fueron extraídos del mar para ser llevados a unos tanques y cuidarlos de alguna exposición bacteriana. Esta medida fue tomada por la Comisión de Conservación de Pesca y Vida Silvestre de Florida (FWC).
Por otro lado, se reveló que la enfermedad se encuentra a unos 430 kilómetros (más de 266 millas) de largo en la costa este de Florida, que va desde el condado Martin hasta cayo Hueso.
Más de sesenta organizaciones ambientales, académicas y gubernamentales se unieron en un plan para recolectar coral sano de las Islas Marquesas y el Parque Nacional Dry Tortugas, las áreas más meridionales del Gran Arrecife de la Florida, que aún no han sido atacadas por el mal.
Esta enfermedad, que se contagia de uno a otro coral por la circulación de la corriente marina, destruye el tejido de los corales (el animal en sí) y hace que se despegue de la estructura sólida que es su esqueleto y quede suelto en el agua.
Las especies extraídas del mar en las Marquesas y Dry Tortugas son prioritarias para preservar la diversidad genética y servirán como reserva para futuros esfuerzos de restauración dentro y fuera del parque.
«Este brote es único debido a su amplio rango geográfico, la duración y el número de especies afectadas», manifestó en un comunicado la FWC.
El Gran Arrecife de Florida, señala la FWC, es el único sistema de barrera de arrecifes en Estados Unidos continentales y alberga aproximadamente a 45 especies de corales que forman arrecifes.
Los corales extraídos entre el 30 de junio y el 4 de julio se depositaron en tanques de la Escuela Rosenstiel de Ciencias Marinas y Atmosféricas de la Universidad de Miami y se transportarán a las instalaciones de la Asociación de Zoológicos y Acuarios del país.
La Escuela Rosenstiel emplea técnicas científicas para cultivar especies de coral amenazadas en viveros submarinos a través del programa de conservación de coral Rescue a Reef.
Fuent: Ciber cuba.