Un joven de 16 años envió un mensaje de texto a sus famigos diciendo: »Cuando la primera vez que tuviste relaciones sexuales fue una violación», adjuntando un vídeo en el que se le veía penetrar a una joven. El agresor publicó las fotos de la víctima y fue llevado a un tribunal de Nueva Jersey, sin embargo, el juez identificado como James Troiano, insistió que solo era una agresión sexual pues si hubiese sido »una violación tradicional» dos o más hombres la hubiesen atacado a punta de pistola.
En este sentido, el joven también fue indultado por provenir de »buena familia».
Por Redacción Miami Diario
Los hechos se remontan a hace dos años. Mary (nombre ficticio), de 16 años, estaba en una fiesta junto con otros 30 jóvenes. Acompañada de un grupo de chicos, entró a tropiezos al sótano, visiblemente borracha. Mary se sentó en un sofá y los jóvenes le rociaron el trasero con Febreze (una marca de desodorante ambiental) y después la azotaron tan fuerte que al día siguiente tenía marcas de manos en sus nalgas, según el informe de los fiscales citados en el fallo del Tribunal de Apelaciones. Luego, G. M. C. grabó un vídeo en el que aparecía Mary y en el que se veía cómo él la penetraba.
Para los fiscales, lo que ocurrió en ese sótano, a oscuras y mientras la puerta estaba bloqueada con una mesa, «no fue un malentendido (…) sino un comportamiento calculado y cruel».
Y a pesar de todo el testimonio y evidencias como el video, el joven no recibió un castigo inmediato. Para el juez James Troiano, que decidió el caso el año pasado, se debe distinguir entre una violación y una agresión sexual.
Además, cuestionó si el nivel etílico de Mary era lo suficientemente alto como para que no entendiera lo que estaba ocurriendo y desestimó los mensajes de texto del acusado porque “los jóvenes dicen muchas estupideces a sus amigos”. Por último, destacó que G. M. C. “proviene de una buena familia que lo matriculó en una escuela excelente en la que se encontraba extremadamente bien». «Sus puntuaciones para ingresar en la universidad fueron muy altas«, afirmó, como si eso fuera un eximente.
El juez Troiano, próximo a cumplir 70 años, jubilado casi por completo, fue “reprendido severamente” por un tribunal de apelaciones en un “mordaz” fallo de 14 páginas que revoca su decisión y en el que le advierte de que no podía mostrar prejuicios frente a los adolescentes privilegiados. El tribunal de apelaciones dio el visto bueno el pasado 14 de junio para que el caso de G. M. C. fuera trasladado a un gran jurado, para que se juzgue al joven como un adulto y se intente, dos años después, hacer justicia.
Fuente: Miami Diario.