Los mensajes de texto, fotos y otros datos almacenados en un teléfono celular utilizado por el ingeniero de registro en el condenado puente peatonal de la Universidad Internacional de Florida podrían ser pruebas clave para comprender por qué se derrumbó el puente.
Pero hay un gran problema con la obtención de esa evidencia: de alguna manera, en algún momento después del colapso, el teléfono utilizado por el ingeniero más importante en el proyecto sufrió «daños por agua», reportó Diario Las Américas.
Eso es lo que los abogados del empleador del ingeniero, FIGG Bridge Engineers, le están diciendo a un tribunal estatal que maneja las demandas contra FIGG y otras personas involucradas en el proyecto.
Pero algunos abogados opositores se muestran escépticos, y uno de ellos dice que FIGG ha «obstaculizado repetidamente» sus esfuerzos por obtener información del teléfono celular o sobre él.
Ahora, la juez de circuito de Miami-Dade, Jennifer Bailey, citando “problemas muy serios” planteados por las acciones de FIGG, también quiere respuestas.
«¿Dónde están estos mensajes de texto?», Preguntó Bailey al abogado de FIGG en una audiencia el mes pasado. “¿Qué está pasando con estos mensajes de texto y por qué no los tengo” más de un año después de que fueron buscados en el descubrimiento previo al juicio?.
Después de que FIGG solicitó otro retraso de 90 días, Bailey había tenido suficiente y le ordenó a FIGG que presentara un testimonio sobre el misterio del teléfono celular empapado en una audiencia el miércoles.
«Necesito a alguien que vaya a prestar juramento y me diga cómo este teléfono dañó el agua y cuándo sufrió daños por el agua», dijo Bailey, y agregó que quería ver en la corte al usuario del teléfono, C. Denney Pate.
Pate, el ingeniero de registro, lideró el diseño técnico de FIGG para el puente y es el mismo ingeniero que dejó un correo de voz dos días antes del colapso para informar al FDOT que el puente estaba resquebrajado y «obviamente algunas reparaciones o lo que sea necesario hacer, pero de una perspectiva de seguridad, no vemos que haya ningún problema allí».
Los abogados del Grupo Louis Berger, contratados para verificar dos veces el trabajo de ingeniería de FIGG antes de que se realizara cualquier construcción, dicen que las actas de FIGG omiten hechos clave, parte, dicen, de un esfuerzo de FIGG para minimizar su responsabilidad por los eventos que llevaron a la puente colapsando, matando a seis.
Lo concreto es que la información contenida en el celular aparentemente dañado por el agua, podría aportar más elementos para entender lo que pasó el día de ese terrible accidente.
Los abogados y la jueza que lleva este caso y otras 24 demandas relacionadas con la caída del puente, están buscando que FIGG aclare lo sucedido con ese teléfono.
Fuente: Miami Diario