Una guerra de tarifas entre Uber y Lyft ha provocado pérdidas multimillonarias a las dos empresas de taxis por internet que se disputan pasajeros y conductores.
Pero en un sentido ha favorecido a los inversionistas que compraron las acciones tras las OPI de las dos empresas: las pérdidas han espantado a la competencia, lo que ha dado a las dos un duopolio en casi todas las ciudades de Estados Unidos.
Las dos compañías con sede en San Francisco han perdido 13.000 millones de dólares en total. Y ante la falta de perspectivas inmediatas de obtener ganancias, nadie más se siente incentivado a aplicar el mismo modelo basado con los conductores humanos.
Eso les permite a Uber y Lyft seguir ofreciendo tarifas bajas para crecer, lo cual es una buena noticia para los pasajeros. Pero pondrá a prueba la paciencia de los inversionistas.