Este martes el gobierno de China confirmó que su máximo responsable económico viajará a Estados Unidos esta semana como estaba previsto para participar en negociaciones arancelarias pese a la amenaza de Donald Trump, de ir un paso más allá en una disputa por las ambiciones tecnológicas de Beijing.
El anuncio sugirió que el gobierno de Xi Jinping estaba poniendo su deseo de acabar con un conflicto que ha afectado a los exportadores chinos por encima de cualquier necesidad de parecer firme ante la presión estadounidense.
El anuncio de Trump del domingo de que aumentará los aranceles sobre importaciones chinas valoradas en 200.000 millones de dólares provocó un desplome en las bolsas de todo el mundo. El lunes pasado los mercados se recuperaron luego de un vocero chino explicó que una delegación seguía preparando el viaje a Estados Unidos, aunque se desconocía si Liu formaría parte de ella.