Los ciudadanos venezolanos, que llegaron a Curazao por vía marítima de forma irregular, fueron ubicados en un centro de detención a la espera de su deportación, ya que las autoridades de este territorio autónomo ligado a los Países Bajos los consideran como inmigrantes ilegales y no como refugiados.
En un esfuerzo por conseguir su liberación tras no haber convencido a las autoridades locales de que son refugiados presentaron una notificación ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos, debido al estatus territorial de Curazao.
Las autoridades locales informaron de que el tribunal, por el momento, ha dejado en suspenso su repatriación hasta que sean conocidas las alegaciones, por lo que Curazao no podrá repatriar al grupo de 32 venezolanos a su país de origen.
“La corte ha impuesto una medida provisional por la cual los venezolanos no pueden ser repatriados hasta después de que sea atendida la petición“, dijo un portavoz del Ejecutivo de Curazao, tras aclarar que podrá presentarse información sobre el caso hasta el próximo 23 de mayo, fecha después de la cual la corte lo examinará.
El Gobierno de Curazao ya esgrimió sobre el caso que no dispone de fondos financieros para fletar un avión que devuelva a su país de origen a los 32 venezolanos.
Fuente: EFE