Gerardo Rendón, alumno de quinto grado de Belle Glade Elementary School, fue atacado tras bajarse del autobús escolar, en la carretera cerca de la entrada del parque de casas móviles Lake Breeze, donde habita.
El menor estaba junto a otros niños más pequeños el pasado jueves por la tarde, cuando vio al animal muy cerca de ellos.
“Estaba preocupado por todos los demás. Me puse delante de él. Traté de hacer que viniera hacia mí porque había muchos niños pequeños allí”, contó.
Pero al parecer, el can sintió su temor, así que cuando el chico trató de correr lo siguió.
“Cuando empezó a perseguirme, pensé: ‘¿Qué hago? ¿En qué me he metido? Espero que este perro no me mate’”, relató Rendón.
El pitbull lo alcanzó y lo mordió en el tobillo, lo tiró al suelo y fue entonces que se le lanzó a la cara. En total, fue mordido al menos 10 veces en la cara, en el brazo izquierdo y en las piernas.
El niño consiguió escapar y su tía lo llevó al hospital. Mientras, los ayudantes del sheriff llegaron al lugar y mataron al perro de tres disparos.
Gerardo tuvo que ser operado esa misma noche, una intervención que duró de cuatro a cinco horas.
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