La prominente asociación mundial de escritores PEN International, con sede en Londres, denunció “la ola represiva y las detenciones arbitrarias” a que son sometidos “los creadores y artistas” en Cuba, a raíz de la promulgación del Decreto Ley 349, con el que el Gobierno cubano propone regular “la vulgaridad, el mal gusto, el intrusismo y la mediocridad”, según el ministerio cubano de Cultura.
A instancias del PEN Club de Escritores Cubanos en el Exilio, con sede en Miami, el organismo central “hace un llamado urgente a las autoridades cubanas para que cesen de inmediato la represión contra la libre manifestación artística y creativa”.
De hecho, el presidente de la agrupación en Miami, José Albertini, declaró a DIARIO LAS AMÉRICAS “nuestro deber es defender a los escritores en Cuba, ya que el llamado PEN Club en Cuba no los defiende”, y argumentó que ese club en la isla “es una organización progubernamental, que logró ser aceptada por el PEN International después de muchos años de presión”.
El decreto ley, que entró en vigor parcialmente el pasado 7 de diciembre en Cuba, “busca regular la producción artística independiente, requiriendo el registro y aprobación previa de toda actividad cultural”, denunció asociación mundial de escritores, que fue fundado en 1921 y hoy reúne a más de 25.000 escritores en el mundo.
“Dichas restricciones”, continúa la denuncia, “incluyen, entre otras cosas, contenidos considerados discriminatorios, violentos, perjudiciales para el desarrollo de la niñez, o que usan los símbolos patrióticos de manera que contravenga la legislación vigente”.
En efecto, el decreto ley ha provocado inusuales protestas del sector artístico de la isla que prácticamente no se veían desde comienzos de la década de los 1960, cuando el régimen de Fidel Castro estableció “dentro de la revolución, todo; contra la revolución, nada”.
Desde entonces, los contenidos artísticos, incluyendo literatura, artes plásticas y escénicas han estado sujetos extraoficialmente a la aprobación de las instancias gubernamentales, pero una ley decreto no había sido establecida.
Entre las preocupaciones de quienes se oponen destaca tener que someter los contenidos y espectáculos a la autorización previa de entidades estatales, lo que puede ser utilizado “como herramienta de censura”.
Efectivamente, quienes han manifestado su disconformidad han sufrido “acoso y detenciones arbitrarias” por hacer uso de la expresión como intelectuales y creadores.
El PEN International cita como caso destacado la detención de Tania Bruguera, que fue apresada el 4 de diciembre, tres días antes que entrara en vigor la ley, y liberada dos días después por protestar, junto a otros creadores, a las puertas del Ministerio de Cultura, en La Habana.
Asimismo, el documento recuerda que el escultor Luis Manuel Otero Alcántar, la pintora Yanelys Nuñez Leyva y el poeta Javier Moreno también fueron detenidos y posteriormente liberados entonces.
Más tarde, durante la celebración la Feria Internacional del Libro en La Habana, la poetisa Katherine Bisquet Rodríguez fue atacada por una turba dirigida por agentes del Gobierno, después de criticar el decreto ley durante su comparecencia en La Casa de la Poesía.
“Estamos en contra de cualquier medida que restrinja la libertad de expresión”, recalcó Albertini.
Fuente: Diario las Américas