Parte de la delegación china se quedó en Washington para continuar las conversaciones sobre un acuerdo comercial entre China y EEUU, informó el periódico The South China Morning Post.
La séptima ronda de conversaciones chino-estadounidenses de alto nivel se celebró en Washington del 21 al 24 de febrero.
El vice primer ministro Liu He, enviado especial del presidente chino Xi Jinping, encabezó la delegación asiática mientras que el representante de comercio de EEUU, Robert Lighthizer, lideró la norteamericana en la Oficina Ejecutiva Eisenhower.Según el medio de prensa chino, las conversaciones formales concluyeron el 24 de febrero, tras lo cual Liu He partió a Pekín, dejando a algunos miembros de la delegación en Washington para continuar las consultas.
Según fuentes del rotativo, las partes mantienen todavía grandes divergencias respecto a asuntos estructurales, en particular, el traspaso de tecnologías.
El 25 de febrero, el presidente de EEUU, Donald Trump, declaró que aplazará el aumento de aranceles a artículos chinos previsto para el 1 de marzo.
El líder estadounidense también destacó un progreso en las negociaciones comerciales con China sobre la propiedad intelectual, la agricultura, los servicios, las monedas, entre otros aspectos.Considerando los avances logrados, anunció que planea celebrar una cumbre con el presidente chino, Xi Jinping, en su mansión de Mar-a-Lago, en Florida, para llegar a un acuerdo.
EEUU y China, la primera y la segunda economías del mundo, respectivamente, se enfrascaron en una guerra comercial después de que Trump, anunció en junio pasado la imposición de aranceles de 25% a productos chinos por valor de 50.000 millones de dólares con el fin de reducir el déficit comercial.
Desde entonces ambos países se han impuesto sucesivas tandas recíprocas de aranceles.A principios de diciembre de 2018, al margen de la cumbre del Grupo de los 20 (G20) países industrializados y emergentes celebrada en Argentina, los líderes de EEUU y China acordaron una tregua en la guerra comercial.
Xi prometió corregir el desequilibrio importando más productos agrícolas, energéticos e industriales de EEUU.
Trump, por su parte, acordó suspender los planes para aumentar los aranceles a productos chinos por un valor de 200.000 millones de dólares del 10 al 25% para allanar el camino para las negociaciones con Pekín, pero advirtió que si estos esfuerzos no tienen éxito en un plazo de tres meses las tarifas serán establecidas según lo planeado.
Cortesía:Sputnik