Fuertes vientos soplaron el lunes por gran parte de la mitad del oriente del país por segundo día consecutivo, dejando sin electricidad a cientos de miles de hogares y negocios, causando el cierre de escuelas, y lanzando enormes bloques de hielo hacia las orillas del lago Erie.
Se reportaron vientos huracanados, de al menos 119 kph (74 mph) en toda la región, incluyendo en Virginia Occidental y Nueva York. Mientras que en la cima del Monte Washington, el más elevado del noreste con 1.916 metros (6.288 pies) en Nueva Hampshire, se registró una ráfaga de 231 kilómetros por hora (144 mph).
Árboles desarraigados y postes derribados, blancos fáciles de los fuertes vientos que los arrancaron después de que la lluvia y la nieve saturaran la tierra, cayeron sobre casas y negocios dejándolos sin electricidad, aunque se prevé que el servicio eléctrico regrese pronto en muchos lugares ya que los vientos menguarán para la noche del lunes. En Nueva York cientos de escuelas cerraron o cancelaron sus clases.
El viento arrancó techos en algunos lugares. En Syracuse, Nueva York el viento causó que el andamiaje de un edificio derribara cables eléctricos.
Advertencias y alertas por vientos seguían en vigor hasta el lunes para las regiones de medio-Atlántico y Noreste hasta el norte de Nueva Inglaterra. En Maine, la policía informó que el conductor de un camión de carga culpó al viento de provocar la volcadura de su vehículo _ que transportaba plátanos. Un conductor en Sandusky, Ohio, grabó un video que muestra a un tracto-camión cayéndose de un puente.
Grandes bloques de hielo cayeron el domingo a la orilla del río Niagara frente a Buffalo, creando una barrera escarpada entre la corriente y una carretera panorámica.
Un video espectacular grabado por guardabosques de Ontario muestra inmensos trozos de hielo haciéndose añicos unos contra otros. Un bloque de hielo en el lago Erie, al norte del río, se había desprendido debido a los vientos. El nivel del lago en la zona oriente aumentó debido a los vientos.
Montículos de hielo de entre 7,5 y 9 metros (25 y 30 pies) de altura también fueron arrastrados más al sur, acumulándose frente a varias propiedades alrededor al lago en el suburbio de Hamburg.
«Hemos tenido tormentas, pero ninguna como esta», dijo Dave Schultz, residente del área, a la televisora WGRZ. «Nunca hemos visto bloques de hielo arrastrados hasta las paredes y nuestros patios… Están en mi patio, el patio de mi vecino, y el patio contiguo».
El domingo se emitió una evacuación voluntaria para el área.
Se prohibió la circulación de camiones de carga vacíos de algunas carreteras.