El nuevo proyecto de ley antirruso de EEUU es un intento de sacar a las compañías rusas competitivas del mercado internacional, denunció el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.
«Detrás de esta muestra de emociones hay un enfoque absolutamente concreto y pragmático, de presión, que no tiene nada en común con las normas internacionales del comercio, un enfoque que limita por momentos con el chantaje, me refiero a los diversos puntos de los proyectos de ley (…) encaminados a frustrar diversos proyectos energéticos de compañías rusas, socavar la actividad de los bancos rusos con participación estatal», declaró.
Según el funcionario, «esto no es otra cosa que un mero intento de sacar las compañías rusas competitivas por medio de una competencia deshonesta y abrir de tal modo un espacio a los negocios estadounidenses y las producciones estadounidenses».»No estamos de acuerdo con esto, lo consideramos inadmisible y consideramos que este tipo de acciones potencialmente pueden ir en contra de las normas reconocidas de comercio internacional y resultar fatales», indicó.
Además, Peskov señaló que esto puede conllevar a «posibles consecuencias negativas para las de por sí ya lamentables relaciones ruso-estadounidenses».
Peskov constató que «vemos sus síntomas, es una rusofobia descarnada, absolutamente emocional, no se basa en datos de expertos, porque de lo contrario en este tipo de proyectos de ley no se hablaría de que Rusia juega un papel desestabilizador en Siria y por el contrario se reconocería el papel decisivo y clave de Rusia para liberar a la región del terrorismo».
El portavoz del Kremlin señaló que los autores de este tipo de proyectos de ley a menudo presentan tales iniciativas «sin comprender en realidad de qué va el asunto porque son rehenes de los estados de ánimo antirrusos».
Además, Peskov señaló que las autoridades rusas desarrollaron una serie de medidas para reducir los riesgos para la economía rusa ante este tipo de chantajes.
Como saben, hemos dicho en reiteradas ocasiones que: a) nuestra economía vive desde hace tiempo bajo unas u otras sanciones; b) nuestra economía aprendió a mantener la estabilidad macroeconómica en estas condiciones; c) nuestra economía aprendió a garantizar el crecimiento en una serie de ramas, a pesar de estas medidas injustas y coercitivas», indicó.
El funcionario señaló que «en primera instancia, ello generó en nuestra economía determinado grado de resistencia».
«Y segundo, claro está, el Gobierno ya desarrolló e implementó una serie de medidas efectivas para protegerse de este tipo de chantajes», afirmó.
A su vez, el jefe del comité internacional del Consejo de la Federación (Senado ruso), Konstantín Kosachov, calificó de «locas» las nuevas sanciones que EEUU planea imponer contra Rusia.
Kosachov escribió en Facebook que EEUU «no tiene otros instrumentos que unas sanciones locas para distraer la atención de sus pretensiones a la hegemonía total, de sus reveses y su deuda de 22 billones de dólares y de la suerte truncada de muchos pueblos».
Al mismo tiempo señaló que la política de EEUU contradice las tesis con que los senadores fundamentan su proyecto de ley.
«Claro está, todas ellas son desagradables, pero por otro lado creamos la base necesaria para tener la posibilidad de reaccionar ante ellas, estar listos», aseveró durante el Foro de Inversiones de Rusia celebrado en Sochi este 14 y 15 de febrero.
Según el vice primer ministro, «ya hemos superado varias etapas de este tipo de sanciones».
«Se trata de la deuda [soberana], ya he dicho en reiteradas ocasiones que en primer lugar lo que realmente vemos es un interés contrario respecto a nuestra deuda por parte de los inversionistas extranjeros; esto golpeará en primera instancia a los extranjeros, ellos mismos se darán un tiro en el pie», aseveró.
El 13 de febrero senadores republicanos y demócratas de EEUU propusieron una nueva legislación para imponer amplias sanciones a los sectores bancario y energético de Rusia, así como a la deuda soberana del país.
De ser aprobada por el Congreso, la legislación requeriría que la administración del presidente Donald Trump imponga dos conjuntos de sanciones, una en respuesta a los supuestos esfuerzos de Moscú por socavar la democracia en el extranjero y otra por las actividades de Rusia en Ucrania.
El primer conjunto de sanciones se centraría en los bancos rusos, los proyectos del gas natural licuado fuera del país, el sector informático, la deuda soberana, las figuras políticas y los empresarios que acompañan al presidente ruso, Vladímir Putin, junto con sus familiares, dijo el comunicado.
El segundo grupo de sanciones estaría dirigido a los 24 agentes del Servicio Federal de Seguridad (FSB, por sus siglas en ruso) que EEUU cree que estuvieron involucrados en el incidente del Estrecho de Kerch, junto con el sector de construcción naval de Rusia, el desarrollo de fuentes de petróleo y proyectos de energía fuera de ese país.
Además, la legislación impondría restricciones para evitar que un Gobierno de EEUU abandone la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
EEUU y sus aliados en la Unión Europea han impuesto varias rondas de sanciones a funcionarios y empresas rusas por la crisis de Ucrania y la reunificación de Crimea.
Fuente: Sputniknews