Su sentencia comenzó admitiendo que mi defendido había presentado un alegato creíble, coherente, que nuestras pruebas eran sólidas y que era mas que razonable la solicitud de asilo político que estábamos formulando”, contó Allen a medios locales en entrevista el pasado martes.
“Pero justo después de decir esto, explicó que él poseía evidencias de que la persecución por motivos políticos en Cuba había disminuido considerablemente y que en consecuencia, el asilo político no era imprescindible en este caso”.
El juicio tuvo lugar a inicios del pasado enero. Según el abogado de inmigración, su única respuesta fue decir que apelarían esta decisión.
¿Cómo responde un abogado cubanoamericano a semejante argumentación?”, dijo Allen.
Sobre todo por las evidencias que el juez exponía como determinantes para considerar que la persecución por motivos políticos había decrecido notoriamente en Cuba: 4 artículos aparecidos en diversos medios en inglés, estadounidenses e internacionales, donde se mostraba la llegada a la presidencia de Miguel Díaz-Canel como un símbolo de apertura y cambio.
“Hay que entender que el asilo político no es un derecho para nadie. Los jueces lo otorgan o no lo otorgan, usted no está necesariamente protegido por el derecho a que le asilen. Sin embargo, quienes sabemos que incluso un vendedor ambulante en Cuba sufre represión política si no declara lealtad al sistema, nos sentimos profundamente preocupados por esta visión de ciertos jueces”.
En agosto del año pasado CiberCuba reveló en exclusiva otro caso donde se denegaba el asilo a un cubano por idénticas razones: Cuba estaba comenzando a ser considerada cada vez menos como una dictadura por los jueces de inmigración.
“Desde el punto de vista político hay poco que hacer en estos momentos”, admite el abogado Allen. “La política del Fiscal General de los Estados Unidos es limitar al máximo el otorgamiento de asilos o refugios para cualquier individuo, y aunque los jueces federales tienen potestad para evaluar los casos según su propio juicio, es indudable que esto influye. Es una especie de orden sugerida: aprovechar cualquier excusa para negar los asilos políticos”.