En Illinois, las temperaturas podrían subir 80 grados en sólo unos días. En Michigan, la nieve que se derrite, la lluvia y una masa de hielo de 17 millas en el río Muskegon podrían provocar inundaciones.
Además, a lo largo de todo el Oeste Medio, un cambio abrupto de temperatura como el que se espera, provocaría cuarteaduras en las carreteras y las principales tuberías que transportan agua y gas. La ola de frío polar han dejado al menos 21 muertos. Entre las víctimas, al menos nueve han fallecido en la ciudad de Chicago, según informa el hospital John H Stroger Jr.
Se espera que en los próximos días el vórtice polar que paralizó a muchas ciudades llegue a su fin con un rápido deshielo que, según los expertos, no tendría precedentes. Las ciudades podrían no estar preparadas para lo que sigue.
«No creo que haya habido un caso en el que hayamos visto un cambio (tan grande) en las temperaturas» en invierno, dijo Jeff Masters a la agencia de noticias The Associated Press, director de meteorología de la firma Weather Underground. «Las rachas de frío extremas en ocasiones anteriores no se han disipado a esta velocidad… Y aquí estamos dirigiéndonos hacia temperaturas primaverales”.
Este jueves, el sistema se movió hacia el este, llevando las condiciones árticas a un área que abarca desde Buffalo hasta Brooklyn. En el oeste de Nueva York, una tormenta que arrojó hasta 20 pulgadas de nieve (51 centímetros) dio paso a temperaturas bajo cero y vientos helados cortantes. En la ciudad de Nueva York, unos 200 bomberos que luchaban contra un incendio en un edificio comercial se turnaban para calentarse en los autobuses.
Para la sección media del país, el alivio del río podría estar al alcance este fin de semana, pero el abrupto cambio traerá consigo nuevos retos.
Rockford, Illinois, tuvo una temperatura récord de menos 31 grados (menos 35 grados Celsius) la mañana del jueves. Este lunes, podría encontrarse a 50 grados (10 grados Celsius). Otras áreas previamente congeladas podrían ver temperaturas de 55 grados o más.
El dramático calentamiento ofrecerá un respiro del frío ártico que canceló clases en las escuelas, cerró negocios y detuvo trenes. Pero aparecerán baches en las carreteras y muchos puentes quedarán debilitados por el ciclo de congelación y descongelación. Ese ciclo puede romper las cañerías de agua y las principales tuberías de las ciudades. Montones de vehículos quedarán con llantas dobladas y desinfladas.
Joe Buck, que administra una compañía de grúas, Schmit Towing, en Minneapolis y pasó 20 horas al día al aire libre esta semana respondiendo a las llamadas de vehículos varados, dijo que ya está recibiendo llamadas para ir el lunes a recoger cientos de vehículos detenidos.
«El domingo va a hacer 39 grados por encima de cero», dijo Buck, que ha tenido a 18 camiones andando todo el día en vientos árticos que descendieron a menos 50 grados.
En Detroit, donde algunas cañerías de agua tienen casi 150 años, los trabajadores de la ciudad estaban lidiando con decenas de averías, dijo Palencia Mobley, subdirectora del Departamento de Agua y Alcantarillado de Detroit.
«Tendremos todas las manos en la cubierta. Con suerte, podremos abordar tantos de los problemas como sea posible durante la próxima semana», dijo Mobley.
El deshielo de las tuberías a veces puede causar un daño mayor que el congelamiento inicial. Las explosiones pueden ocurrir cuando el hielo en el interior comienza a derretirse y el agua se precipita a través de la tubería, o cuando el agua de la tubería es empujada hacia una llave cerrada al expandirse el hielo.
En otro lugar, se cerró un puente en la comunidad de Newaygo, en el oeste de Michigan, a 64 millas al norte de Grand Rapids, cuando el río Muskegon, atascado de hielo, se elevó por encima del nivel de inundación. Funcionarios en Buffalo, Nueva York, registraron inundaciones en el río Upper Niagara debido al hielo.
En otros indicios de que lo peor de la congelación estaba terminando, Xcel Energy retiró el jueves una solicitud a sus clientes de gas natural de Minnesota para bajar temporalmente sus termostatos para aliviar las preocupaciones sobre la conservación del gas.
Más temprano en el día, varias ciudades establecieron nuevos mínimos históricos. Rockford, Illinois, vio una temperatura baja récord de menos 31 (menos 35 grados Celsius), el jueves. Cedar Rapids, Iowa, estableció un récord diario de menos 30 grados (menos 34 grados Celsius).
La temperatura de Chicago cayó a un mínimo de alrededor de menos 21 grados (menos 30 grados Celsius) el jueves, ligeramente por encima de la lectura más baja de la ciudad de menos 27 grados (menos 32 grados Celsius) en enero de 1985. La baja de Milwaukee fue menos 25 grados (menos 31 grados Celsius), y Minneapolis registró menos 24 grados (menos 31 grados Celsius). Los escalofríos del viento eran aún más bajos.
En Michigan, los esfuerzos por conservar el calor durante el frío extremo redujeron el uso de gas en un 10% luego de un incendio en una importante instalación de gas natural, dijeron las autoridades. Consumers Energy, el mayor proveedor de gas natural del estado, solicitó a sus 1,7 millones de clientes y otros que continúen configurando sus termostatos a 65 grados (18 grados centígrados) o menos hasta el viernes por la mañana.
«En nuestros 130 años, nunca hemos experimentado este tipo de demanda ni este tipo de temperaturas», dijo la CEO Patti Poppe.
Masters, de Weather Underground, dijo que el vórtice polar estaba «girando hacia Canadá» y que no se espera que regrese en las próximas semanas. Si regresa a fines de febrero, «no será tan intenso».
Aun así, los recuerdos del frío peligroso estaban destinados a persistir.
Al menos 144 personas visitaron las salas de emergencia de los hospitales por lesiones relacionadas con el frío durante dos días. La mayoría de las lesiones fueron hipotermia o congelación, según un portavoz del Departamento de Salud Pública de Illinois.
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