(MiamiNews24).-Brenda Snipes, supervisora de elecciones del Condado Broward, asediada por sus continuos errores, presentó el domingo su renuncia.
La renuncia de Snipes, que reportó primero el periódico Sun-Sentinel, tuvo lugar solo horas después que su personal concluyó una jornada brutal de dos semanas en la cual extraviaron 2,000 boletas durante un recuento estatal, mezclaron unas dos docenas de boletas invalidadas con cerca de 200 buenas, y no cumplieron con una fecha límite para entregar al estado los resultados de los recuentos hechos a máquina.
Snipes fue calificada de corrupta por el presidente Donald Trump mientras el gobernador republicano Rick Scott la acusó sin evidencia de intentar robar las elecciones por el Senado y el senador Marco Rubio afirmaba que era una persona “incompetente”.
Motivados por todas las alegaciones, cientos de manifestantes republicanos pasaron días afuera de las oficinas de Snipes en Lauderhill durante un recuento que ordenó el estado afirmando que la supervisora manipuló las elecciones.
El domingo, los intentos por localizar a Snipes y a Burnadette Norris-Weeks, abogada de elecciones del Condado Broward, resultaron infructuosos. El Sun-Sentinel reportó que la fecha efectiva de la renuncia de Snipes es probable que sea la primera semana de enero.
Evelyn Pérez-Verdia, ex consultante de comunicaciones de la oficina de Snipes, escribió en Twitter el domingo por la tarde que Snipes había enviado su dimisión al estado. “Hablé con uno de sus principales asesores, quien confirmó que la carta de renuncia se mandó hoy”, tuitió Pérez-Verdia.
Con la renuncia de Snipes termina un mandato de 15 años que comenzó en 2003 cuando el entonces gobernador Jeb Bush la nombró para sustituir a la problemática supervisora de elecciones Miriam Oliphant, a quien Bush suspendió por serios errores de su oficina.
Snipes fue elegida en 2004 y reelegida tres veces después, la más reciente en el 2016, unas elecciones en las que fue criticada por dejar una preguntas sobre la marihuana medicinal fuera de algunas boletas y por dar a conocer de forma ilegal los totales de las votaciones antes que cerraran los colegios electorales. Sin embargo, Snipes, de 75 años, acumuló un largo historial de problemas en su departamento.
Los abogados republicanos la acusaron de llevar a cabo procedimientos impropios durante las elecciones presidenciales, ataques que ella culpó a la política en el condado más demócrata de la Florida, y posteriormente fue castigada por un juez por destruir de forma prematura boletas de una contienda por un puesto en el Congreso.
Más recientemente, durante las primarias del 2018, consultantes demócratas criticaron su departamento después que trabajó con gran lentitud para dar a conocer los resultados, lo que fue un precursor de las elecciones generales, momentos en que la oficina de Snipes siguió procesando durante días boletas anticipadas y de ausente, lo que a la larga obligó a que a las contiendas por el cargo de gobernador, un escaño en el Senado federal y el puesto de comisionado de Agricultura se les ordenara recuentos a máquina.
Snipes no pudo dar explicaciones de por qué su oficina siguió procesado decenas de miles de boletas anticipadas y de ausente dos días después que secerraron las urnas en las elecciones medio término. Posteriormente, un juez le ordenó a Snipes que entregara públicamente las boletas luego que Scott la demandara por no dar información que debía conocer el público.
La dimisión de Snipes deja el cargo libre para que lo ocupe la persona que elija el nuevo gobernador DeSantis. Quienquiera que dirija la oficina se encargará de supervisar las elecciones presidenciales del 2020 en Broward.El reportero del Miami Herald Alex Harris contribuyó a este reportaje.
Fuente:El Nuevo Herald.