(Miaminews24).-La prensa estatal apeló a la «dignidad» para justificar la decisión del Gobierno de acabar su participación en el programa Más Médicos.
«La manipulación política no pudo con la dignidad de los médicos cubanos»fue la frase con que Granma (Periódico cubano) abrío este sábado la portada de su edición digital.
Los principios de la Salud cubana no se negocian: «Tenemos que proteger a nuestros colaboradores», así presenta Cubadebate un resumen del programa Mesa Redonda de la televisión estatal, dedicado al asunto.
En su intervención la viceministra de Salud Pública, Marcia Cobas, reiteró que su Gobierno dejó de participar en el Programa Más Médicos porque las condiciones establecidas a través de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) para la colaboración en Brasil habían cambiado.
«Hay términos establecidos que ahora se cuestionan por el presidente electo de Brasil y tenemos que proteger a nuestros colaboradores», concluyó.
Ni esta, ni otras notas del medio digital entran en detalles de las condiciones impuestas por Jair Bolsonaro, a quien La Habana acusó de realizar «referencias directas, despectivas y amenazantes a la presencia» de los médicos cubanos.
En su declaración del miércoles, el MINSAP consideró que el mandatario ha «irrespetado» a la Organización Panamericana de la Salud y a lo convenido por esta con el Gobierno de Cuba, «al cuestionar la preparación de nuestros médicos y condicionar su permanencia en el programa a la reválida del título y como única vía la contratación individual».
Bolsonaro también criticó que el 75% de los salarios de los médicos cubanos se pague al Gobierno cubano y que sus hijos no tengan permitido reunirse con ellos en Brasil, pero sobre esto nada dicen las voces oficiales del régimen.
Por eso se pueden leer titulares como «con la cabeza en alto regresaremos a la Patria» o «Nos llevaremos a Cuba las miradas agradecidas» de los pacientes brasileños o al estilo de «Médicos cubanos en Brasil: ¿ponerle condiciones a la vida?» o «Cuando la dignidad se viste de blanco».
DIARIO DE CUBA aseguró que en todos se repiten discursos a tono, por ejemplo, con las palabras que Miguel Díaz-Canel les dedicara en Twitter.
«Con dignidad, profunda sensibilidad, profesionalidad, entrega y altruismo, los colaboradores cubanos han prestado un valioso servicio al pueblo de Brasil. Actitudes con tal dimensión humana deben ser respetadas y defendidas», escribió el gobernante.
«Con la frente bien en alto, ustedes son un ejemplo insuperable de humanismo y dignidad. Los que piensan vanidosamente solo en sí mismos no pueden entender la esencia de nuestras convicciones internacionalistas.#SomosCuba«, añadió en otro tuit replicado.
La prensa estatal también recogió la repercusión que ha tenido en Brasil la decisión de La Habana de poner fin a su participación en Más Médicos, en voces opuestas al presidente electo, a quien culpan de la situación.
Una reflexión de la expresidenta Dilma Rousseff sale en todos los medios oficiales cubanos.
«El desprecio de Bolsonaro a los médicos cubanos y otros extranjeros en ejercicio en el programa es un atentado contra la población brasileña, que dejará de tener acceso a valerosos y competentes profesionales en la atención primaria a la población más pobre de nuestro Brasil», criticó Rousseff.
«La población brasileña fue beneficiada por la generosa competencia de los médicos cubanos, a quien el Gobierno de Brasil debiera reconocer su fraterna solidaridad. A ellos les rindo mi homenaje y mi agradecimiento. La labor de estos profesionales dedicados y generosos hará falta a los brasileños», concluyó la artífice de Más Médicos.
Para Juventud Rebelde, «lo que Bolsonaro no puede tergiversar, ni esconder», es que si «primaran en los generosos y eficaces profesionales de la Salud de la Isla los sentimientos individualistas que preconiza» un hombre como él «la salud pública cubana no habría escrito el libro de entrega internacionalista que atesora».
El periódico tampoco hurga en los requisitos «inadmisibles» que motivaron la decisión del MINSAP. Eso sí, vincula a Bolsonaro con «personajes de la ultraderecha y anticubana claque de Florida como el senador Marco Rubio».
Además, consideró que «si no hubiera bloqueo es muy posible que el desarrollo económico alcanzado por Cuba no la obligara a contar con la contribución obtenida por los recursos humanos que formó, para garantizar a otros 11 millones de cubanos la salud, la educación, y otras condiciones de vida que (…) lamentablemente, millones de brasileños no tienen».
La prensa cubana pasó por alto también las demandas que ha presentado un numeroso grupo de médicos a los que el Gobierno presenta como «desertores» y cuyos integrantes se identifican como «cubanos libres».
En noviembre denunciaron ante la Corte Interamericana de los Derechos Humanos, la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos, el papa Francisco, el entonces presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, la Organización de Estados Americanos y la Organización de Naciones Unidas las condiciones de»esclavitud» a las que fueron sometidos en sus misiones.
Su reclamo para que cese el «castigo» por el cual se les niega la entrada a la Isla durante ocho años y que consideran «violatorios de sus derechos más esenciales y humanos» tampoco tiene eco en la prensa estatal que por estos días se enfoca en descargar toda la culpa en Bolsonaro.
Fuente:DLA