(Miaminews24).-Jeff Sessions, Fiscal General de Estados Unidos, encabeza el Departamento de Justicia que ha implantado la política de «tolerancia cero» con la inmigración.
Miles de personas se han manifestado este jueves en 80 ciudades de Estados Unidos contra la decisión de Donald Trump de separar a las familias de inmigrantes detenidas en la frontera, hecho que califican de «inhumano» e «inmoral».
«Este llamado no es solo a la Administración sino a la sociedad estadounidense, para que entienda que es inhumano lo que estamos haciendo a estos niños y a estas madres», dijo a Efe Karla Estrada, fundadora de UndocuTravelers, uno de los grupos que participaron en las protestas convocadas por la organización Familias Unidas, No Divididas. Karla Estrada formó parte de la concentración del Parque McArthur de Los Ángeles, punto de encuentro de la comunidad centroamericana, donde se concentraron un gran número de inmigrantes que cruzaron la frontera de manera ilegal y expresaron su respaldo a los indocumentados.
«Es una cuestión de vida o muerte», alegó la salvadoreña María Urque, quien llegó a Estados Unidos en la década de los ochenta junto a su familia. Asegura que las medidas del actual gobierno no van a detener la inmigración. California fue el estado en el que se convocaron más manifestaciones, en un total de 18 ciudades que acogieron a defensores de los inmigrantes, grupos religiosos, sindicatos, legisladores demócratas y estudiantes. En todas se pedía la liberación de los menores retenidos y se mostraba el rechazo a la posibilidad que está barajando el gobierno de habilitar carpas en bases militares para alojar a los niños.
Washington también congregó varias protestas. En una de ellas, congresistas como Luis Gutiérrez, John Lewis, Raúl Grijalva, Jan Schakowsky, Pramila Jayapal y Joe Crowley encabezaron una sentada delante de la sede de la Patrulla Fronteriza (CBP), criticada también por no entregar cifras concretas sobre el número de niños que han sido separados de sus padres.
La legisladora demócrata Nevada Catherine Cortez señaló durante otra manifestación en Washington que «la crisis no fue causada por el Congreso sino por el presidente Trump», y recalcó que solo basta una orden de Trump para detener la reclusión de los menores y devolverlos con sus familias.
Anna Tarkov, coordinadora nacional de Familias Unidas, No Divididas recalcó que el repudio a la política de «tolerancia cero» con la inmigración implantada por el Departamento de Justicia, que encabeza Jeff Sessions debe provenir tanto de republicanos como de demócratas. Alegó que «no es un problema político, es moral».
Algunos estados de tradición republicana, como Texas, también han registrado protestas. En una de ellas, los manifestantes llamaron a la movilización masiva en las urnas el próximo mes de noviembre, cuando se celebren las elecciones de término medio. «No puedo votar pero puedo movilizar a las personas para que voten por aquellos que reciban a los inmigrantes con dignidad e igualdad», dijo Daniela, inmigrante colombiana.
Fuente: 20 Minutos