(Miaminews24).- El boxeador cubano, Marcos Forestal, nunca ha peleado en Miami y eso no parece que vaya a cambiar. Por el momento, el cubano seguirá buscando peleas donde las haya y este sábado la encontrará en Tijuana, una de las ciudades de mayor tradición de boxeo en México y donde las batallas no suelen ser un paseo sobre alfombra roja.
Forestal (7-0, 4 KO) enfrentará en la arena Las Torres al local José «Sonrics» Suárez en el inicio de un nuevo capítulo de una carrera que busca despegar de manera definitiva en medio de varias intermitencias e interrupciones.
«Por un momento pensé que más nunca iba a boxear, que jamás volvería a ponerme los guantes», comentó Forestal. «Pero han pasado cosas buenas. Me siento renovado física y mentalmente, con más deseos que nunca».
Esta será la segunda pelea en la ciudad fronteriza para Forestal, quien ya combatió allí en febrero del 2016, cuando venció a Gonzalo López por nocaut técnico antes de celebrar sus dos últimos enfrentamientos en Wisconsin.
El cubano, que estrena un nuevo equipo de trabajo, abandonó en abril del 2014 una escuadra nacional que asistía a un torneo de la Serie Mundial de Boxeo con sede en los Estados Unidos.
En algún momento, el guerrero de Guantánamo estuvo cerca de firmar con Premier Boxing Champions y caer bajo la órbita del «consejero» Al Haymon, pero al final decidió ir por otro camino.
Su primer acuerdo de representación lo firmó con el entonces conocido empresario irlandés Gary Hyde, quien estuvo igualmente muy ligado a la carrera de Guillermo Rigondeaux en sus comienzos.
Posteriormente, Forestal vino a Miami e integró la escuadra de King Kong Boxing, pero en ninguno de los casos su trayectoria profesional dio un salto como para ser tenido en cuenta en las grandes carteleras.
«Hombre, he pasado de todo en mi vida, he ido de manager en manager, de entrenador en entrenador, otro se habría cansado de todo», agregó Forestal, quien posee una nueva representante en Christina Carrillo. «Incluso, me compré un camión y lo puse a trabajar para ganarme la vida con eso. De verdad, creí que todo había terminado para mí en el ring».
Como otros compatriotas suyos, Forestal decidió marcharse de Miami y ahora se ha establecido en San Diego, donde entrena con el mexicano Carlos Barragán, con quien dice sentirse a gusto.
A sus 29 años de edad, Forestal encuentra una nueva oportunidad de exhibir sus talentos y ofrecerle algo más de esperanza a la continuidad del boxeo cubano en este país, junto con otros jóvenes como Ramón Luis Nicolás y Liván Navarro.
«Quiero mucho a Miami, pero tenía que irme de ahí, porque sentía que mi carrera no iba a ninguna parte», apuntó Forestal. «Aún me queda tiempo para lograr mis metas de ser alguien en el boxeo profesional».
Con información de ENH.
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